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(Bloomberg) — Las acciones asiáticas cayeron en picado debido al temor a una desaceleración económica más profunda en Estados Unidos, una caída prolongada en las acciones japonesas y las crecientes tensiones en Oriente Medio, lo que provocó una estampida de activos de riesgo.
La mayoría de los índices bursátiles de la región se encontraban en cifras sombrías el lunes, con Japón y los mercados centrados en tecnología de Taiwán y Corea soportando la peor parte de la venta masiva: sus referencias cayeron más del 7% cada una. El índice MSCI Asia Pacific se desplomó hasta un 4,3%, en camino a una corrección técnica y listo para borrar todas sus ganancias en el año.
La gigante taiwanesa Taiwan Semiconductor Manufacturing Co. se encaminaba hacia una caída récord, mientras que las acciones financieras e industriales eran los principales lastres en el índice regional.
La huida hacia la seguridad se ha intensificado después de que datos económicos débiles de Estados Unidos sembraran la preocupación de que la Reserva Federal podría haber estado rezagada en la reducción de tasas y ahora probablemente necesitará flexibilizar agresivamente la política monetaria para evitar una recesión. Las tensiones geopolíticas en Oriente Medio también mermaron el apetito por el riesgo, ya que Israel se preparaba para un posible ataque de Irán y milicias regionales en represalia por el asesinato de funcionarios de Hezbollah y Hamas.
Esto “se siente más como un riesgo generalizado en los mercados de acciones globales y la toma de ganancias se está realizando en sectores o geografías que han tenido buen rendimiento”, dijo Vey-Sern Ling, director general de Union Bancaire Privee.
En Japón, los índices Topix y Nikkei 225 cayeron más del 8% cada uno a medida que la confianza de los inversores se desmoronaba debido a un repunte del yen, una política monetaria más estricta y una preocupación más amplia sobre la economía estadounidense. Las pérdidas recientes llevaron a los dos índices a caídas superiores al 20% cada uno, colocándolos en camino hacia mercados bajistas.
El índice de referencia Kospi de Corea del Sur cayó más del 7% a medida que la rotación lejos de los mercados centrados en tecnología se intensificaba. El Kospi también aumentó sus pérdidas desde un pico del 11 de julio a más del 10% para encaminarse hacia una corrección técnica.
Un interruptor automático interrumpió la negociación de futuros del Topix durante unos 10 minutos, mientras que la bolsa de valores de Corea también suspendió temporalmente las órdenes de venta de operaciones programadas en el Kospi después de que los futuros del Índice Kospi 200 cayeran más del 5%.
“El sentimiento hacia las acciones probablemente seguirá siendo frágil por ahora, ya que el debate en el mercado probablemente se centrará en si Estados Unidos tendrá una suave desaceleración o una recesión, con el próximo informe importante sobre el mercado laboral dentro de un mes”, dijo Chetan Seth, estratega de acciones de Asia-Pacífico en Nomura Holdings Inc.
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