Los fabricantes de automóviles extranjeros en China sufren para mantenerse competitivos en el mercado de vehículos eléctricos más grande del mundo y buscan ayuda de gigantes tecnológicos locales, donde brillantes pantallas inteligentes, conducción asistida y tecnología de mapas sofisticada están en alta demanda.
En el reciente Auto Show de Beijing, la mayor exposición de automóviles de China, varias empresas extranjeras anunciaron asociaciones tecnológicas, desde Nissan uniéndose a Baidu hasta Toyota firmando un acuerdo de cooperación con Tencent.
Las dos compañías japonesas se encuentran entre varios titanes automovilísticos tradicionales, una vez dominantes en China, que ahora luchan por mantenerse al día con una nueva generación de startups locales de vehículos eléctricos.
“Son empresas notoriamente conservadoras y no tienen competencias tecnológicas”, dijo Tu Le, director general de Sino Auto Insights, a AFP.
“Han intentado invertir en tecnología de vanguardia para el espacio automotriz pero no les resulta natural,” indicó.
“Pero se ven obligados a intentar ser más abiertos a la tecnología debido a hacia dónde se está moviendo el mercado en China y los nuevos entrantes en el espacio, compañías como Xiaomi y Huawei con antecedentes en productos tecnológicos de consumo de alta tecnología,” agregó.
Esas empresas ahora están inmersas en una brutal guerra de precios con más de 100 marcas chinas de automóviles eléctricos, todas luchando por ofrecer los precios más atractivos y la tecnología más avanzada a los consumidores más adinerados.