Escribiendo en Instagram, Gadot dijo que el último año había sido “uno de desafíos profundos y reflexiones profundas”, y que no había estado segura de si compartir detalles de su emergencia de salud.
“Quizás esta sea mi forma de procesarlo todo, de tirar hacia atrás la cortina sobre la frágil realidad detrás de los momentos editados que compartimos en las redes sociales”, escribió.
“Sobre todo, espero que al compartirlo, pueda aumentar la conciencia y apoyar a otros que puedan enfrentar algo similar”.
Explicó: “En febrero, durante mi octavo mes de embarazo, me diagnosticaron un coágulo de sangre enorme en el cerebro.
“Durante semanas, había soportado dolores de cabeza atroces que me confinaron a la cama, hasta que finalmente me sometí a una resonancia magnética que reveló la aterradora verdad.
“En un momento, mi familia y yo nos enfrentamos a lo frágil que puede ser la vida. Fue un recordatorio severo de lo rápido que todo puede cambiar, y en medio de un año difícil, todo lo que quería era aferrarme y vivir”.
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