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BERLÍN (AP) — Funcionarios gubernamentales y residentes locales asistieron a una misa solemne el domingo para honrar a un niño y un hombre asesinados en un ataque con cuchillo en Alemania, un asalto que amplificó el debate sobre la migración antes de las elecciones generales del 23 de febrero.
El servicio religioso en la iglesia colegiata de Aschaffenburg, Baviera, fue brevemente suspendido para el repique de las campanas de la ciudad en el momento exacto en que ocurrió el ataque el miércoles a las 11:45 a.m.
El gobernador de Baviera, Markus Söder, el alcalde de Aschaffenburg, Jürgen Herzing, y un líder musulmán se dirigieron a la congregación que incluía a los rescatistas, para expresar dolor e incredulidad por la pérdida de vidas. La ministra del Interior de Alemania, Nancy Faeser, también estuvo presente.
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El ataque es políticamente sensible a un mes de las elecciones nacionales de Alemania, ya que la política de migración está entre los principales temas de campaña.
Un niño de 2 años de origen marroquí, que formaba parte de un grupo de niños de jardín de infancia, fue asesinado, junto con un hombre alemán de 41 años que aparentemente intervino para proteger a los niños en un parque de la ciudad. El sospechoso es un ex solicitante de asilo de 28 años de Afganistán a quien se le había ordenado abandonar Alemania. Los funcionarios dijeron que había recibido tratamiento psiquiátrico y no había indicación inmediata de que estuviera motivado por el extremismo.
Funcionarios de Baviera dijeron que dos adultos y una niña siria de 2 años también resultaron heridos en el ataque y fueron hospitalizados, pero no había peligro para sus vidas.