Las fuerzas de seguridad sirias fueron desplegadas en una ciudad predominantemente drusa en las afueras de Damasco, la capital, temprano el domingo, dos días después de un tiroteo entre oficiales del gobierno y hombres armados de un barrio local que dejó una persona muerta y varios heridos.
Una tensa calma ha regresado a la ciudad, Jaramana, después del mortal enfrentamiento del viernes por la noche entre las fuerzas de seguridad del nuevo gobierno de Siria y los drusos, una minoría religiosa. La persona asesinada era un oficial de seguridad, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, que añadió que otras nueve personas resultaron heridas.
Los líderes espirituales drusos culparon a la muerte a “una multitud indisciplinada que no pertenece a nuestras costumbres, ni a nuestras conocidas tradiciones o costumbres.”
Hubo informes contradictorios sobre cómo se desarrolló el episodio en Jaramana, pero el enfrentamiento cobró relevancia internacional el sábado cuando el primer ministro Benjamin Netanyahu de Israel dijo que había instruido al ejército “para preparar y entregar un mensaje de advertencia fuerte y claro: si el régimen daña a los drusos, nosotros lo dañaremos.”
Los drusos son una minoría religiosa con poblaciones en Siria, incluido el territorio de los Altos del Golán, que Israel capturó y anexó ilegalmente, y en Líbano e Israel.
Los líderes drusos y gubernamentales sirios rechazaron rápidamente y firmemente cualquier amenaza de intervención por parte de Israel.
“Somos ciudadanos árabes sirios y esperamos una respuesta de la administración y el gobierno”, dijo Rabih Munthir, líder druso en Jaramana. “No estamos pidiendo protección a nadie, y no pediremos protección a nadie. Somos ciudadanos que han vivido en esta tierra durante más de 1.000 años.”
Un oficial de seguridad sirio, teniente coronel Hossam al-Tahan, jefe de la dirección de seguridad en los suburbios de Damasco, dijo el sábado que estaban trabajando con líderes locales para rastrear a todos los involucrados en el tiroteo.
“Afirmamos que no permitiremos que ninguna entidad socave la unidad de Siria”, dijo, según los medios estatales sirios. “Nuestro único problema es con aquellos que llevaron a cabo el ataque y el asalto, y pedimos a las mentes razonables que reconozcan que este camino amenaza la seguridad, la estabilidad y la unidad de Siria.”