Los fiscales franceses han cerrado un caso presentado por la República Democrática del Congo (RDC) contra subsidiarias de Apple por el presunto uso de minerales en conflicto en su cadena de suministro. La oficina del fiscal de París determinó que las acusaciones de lavado de dinero y prácticas comerciales engañosas no estaban “suficientemente fundamentadas” y cerró el caso el 18 de febrero.
Congo presentó denuncias penales contra filiales de Apple en Francia y Bélgica en diciembre. Apple refutó las acusaciones y afirmó que había instruido a los proveedores para que no utilizaran los minerales en cuestión de Congo o Ruanda.
La oficina del fiscal de París señala que Congo debería contactar a otra oficina “con jurisdicción sobre crímenes de guerra”. Los abogados de Congo describieron la decisión como un “archivo parcial muy parcial” y pretenden impugnarla.
Congo es una gran fuente de minerales 3T (estaño, tantalio y tungsteno) utilizados en computadoras y teléfonos móviles. Algunas minas artesanales en la región están controladas por grupos armados involucrados en diversos delitos, incluyendo masacres, violaciones masivas y saqueos. Las regiones mineras del este de Congo han sido afectadas por conflictos entre grupos armados, algunos apoyados por Ruanda y la milicia congoleña desde la década de 1990.
En Francia, el caso fue cerrado por los fiscales el 18 de febrero. En Bélgica, se designó a un magistrado instructor en respuesta a la denuncia, según un abogado de Congo en enero.
Los abogados que representan a Congo, William Bourdon y Vincent Brengarth, enfatizaron la “extrema gravedad de los hechos denunciados” y expresaron su intención de impugnar la decisión.
Hasta la publicación del informe, ni la oficina del fiscal ni Apple habían respondido de inmediato a las solicitudes de comentarios sobre el asunto.
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