Un magistrado keniano que fue disparado por un oficial de policía de alto rango a principios de esta semana ha fallecido, según el jefe de justicia del país.
La jueza Martha K Koome escribió en X, anteriormente Twitter, que la magistrada principal de Makadara, Mónica Kivuti, había “perdido la batalla” contra sus “extensas lesiones”.
La Sra. Kivuti fue tiroteada por un policía en un tribunal en la capital, Nairobi, el jueves después de que cancelara la fianza de la esposa del oficial debido a la desaparición de la mujer.
El policía, identificado como Samson Kipchirchir Kipruto, fue él mismo abatido por otros oficiales tras el ataque.
Tres de estos oficiales resultaron heridos en el ataque pero se dice que están en condición estable.
“Con gran pesar informo a la nación que la Hon. Mónica Kivuti, Magistrada Principal de los tribunales de ley de Makadara, ha perdido la batalla contra las extensas lesiones sufridas durante un ataque armado en el tribunal”, dijo la jueza Koome en un comunicado el sábado.
“La familia judicial se solidariza durante este momento profundamente traumático y pide sensibilidad y compasión mientras compartimos el dolor”.
Según el periódico The Star, que habló con una fuente en el Hospital de Nairobi, la Sra. Kivuti falleció la noche del viernes después de ser disparada en el pecho y la pierna.
Los tribunales de ley de Makadara permanecerán cerrados hasta el lunes.
El servicio de policía nacional dijo en un comunicado el jueves que Kipruto, quien estaba a cargo de una estación de policía en Londiani, en el oeste de Kenia, había estado en el tribunal por “razones desconocidas” durante una audiencia en el caso de su esposa. Ella fue acusada de recibir dinero “bajo falsas pretensiones”.
Las investigaciones sobre lo ocurrido continúan.
La jueza Koome dijo que estaba claro que Kipruto tenía la intención de matar a la Sra. Kivuti.
El incidente dentro del tribunal ha impactado a los kenianos.
A menudo se ha acusado a la policía de estar involucrada en asesinatos extrajudiciales pero no se ha reportado ningún incidente de este tipo dentro del tribunal.
El poder judicial ha dicho que reforzará las medidas de seguridad y ha asegurado al personal judicial y a otros usuarios del tribunal su seguridad.
El Colegio de Abogados de Kenia dijo en un comunicado que el incidente “no es un evento aislado, sino parte de una tendencia preocupante de amenazas y ataques crecientes contra los funcionarios judiciales y los abogados”.
“Las disputas legales pueden ser muy emotivas y los riesgos para los funcionarios judiciales y los abogados no pueden ser subestimados”.
El colegio añadió que trabajarían con la jueza Koome para “desarrollar estrategias integrales destinadas a salvaguardar nuestro sistema judicial y sus practicantes”.