Estados Unidos culpó el domingo a Hezbollah, con sede en Líbano, de un ataque con cohetes en los Altos del Golán ocupados por Israel que mató a 12 niños y adolescentes en un campo de fútbol, mientras se elevaba la amenaza de una guerra más amplia en el Medio Oriente.
Israel también culpó a Hezbollah y dijo que golpearía con fuerza al grupo respaldado por Irán después del ataque del sábado, pero Hezbollah ha negado toda responsabilidad.
El ataque despertó temores de un conflicto más amplio en la región, donde las tensiones se han intensificado debido a la guerra de Israel en Gaza. Esa ofensiva, que comenzó hace más de nueve meses, ha matado a decenas de miles de personas y ha causado una crisis humanitaria masiva en todo el estrecho enclave costero.
“Este ataque fue llevado a cabo por Hezbollah libanés. Fue su cohete y fue lanzado desde un área que ellos controlan,” dijo la Casa Blanca en un comunicado el domingo. Añadió que Washington ha estado en conversaciones con funcionarios israelíes y libaneses desde el ataque del sábado, que condenó y describió como “horroroso.”
El Secretario de Estado de EE. UU., Antony Blinken, dijo el domingo que no quiere ver una escalada del conflicto en la frontera norte de Israel y reiteró el apoyo de EE. UU. a Israel.
“Hago hincapié en (su) derecho a defender a sus ciudadanos y en nuestra determinación de asegurarnos de que puedan hacerlo,” dijo Blinken durante una conferencia de prensa en Tokio. “Pero tampoco queremos ver que el conflicto se intensifique. No queremos ver que se propague.”
La Casa Blanca dijo que Washington está trabajando en una solución diplomática para poner fin a los ataques en la frontera entre Israel y Líbano.
El asesor de seguridad nacional de la vicepresidenta Kamala Harris, Phil Gordon, dijo el domingo que la candidata presidencial ha sido informada y está vigilando de cerca la situación.
“Israel sigue enfrentando graves amenazas a su seguridad, y el apoyo de la vicepresidenta a la seguridad de Israel es inquebrantable,” dijo Gordon en un comunicado.
Blinken dijo que se entristeció por la pérdida de vidas y añadió que llegar a un acuerdo de alto el fuego en la guerra en Gaza podría ayudar a calmar la situación en la frontera de Israel con Líbano.
“Es muy importante que ayudemos a desactivar ese conflicto, no solo para prevenir que se intensifique, que se propague, sino para desactivarlo porque hay tanta gente en ambos países, en tanto Israel como en Líbano, que han sido desplazados de sus hogares,” dijo Blinken.
Estados Unidos, Qatar y Egipto han tratado de mediar en la disputa. Pero Israel y el grupo islamista palestino Hamas, que controla Gaza, aún no han forjado un alto el fuego permanente en Gaza.
El líder de la mayoría del Senado de EE. UU., Chuck Schumer, hizo eco el domingo de la declaración de Blinken. “Israel tiene todo el derecho a defenderse contra Hezbollah como lo hace contra Hamas,” dijo Schumer a CBS News en una entrevista.
“No creo que nadie quiera una guerra más amplia. Así que espero que haya movimientos para desescalar,” agregó Schumer.