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Por Steve Holland y Katharine Jackson
WASHINGTON (Reuters) – Estados Unidos trabajará con socios y partes interesadas en Siria para ayudar a aprovechar una oportunidad y gestionar el riesgo, dijo el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, el domingo después de que los combatientes rebeldes derrocaran al presidente sirio Bashar al-Assad.
En declaraciones en la Casa Blanca, Biden dijo que Estados Unidos apoyará a los vecinos de Siria durante el período de transición y analizará las palabras y acciones de los grupos rebeldes.
Biden dijo que Estados Unidos no sabe oficialmente el paradero de Assad, pero señaló informes de que huyó a Moscú. Dijo que Assad “debería rendir cuentas”.
Biden dijo que Siria se encuentra en un período de riesgo e incertidumbre y que es la primera vez en años en que ni Rusia ni Irán ni la organización militante Hezbollah desempeñaban un papel influyente en Siria.
“Durante años, los principales patrocinadores de Assad han sido Irán, Hezbollah y Rusia. Pero durante la última semana, su apoyo se derrumbó – los tres – porque los tres son mucho más débiles hoy de lo que eran cuando asumí el cargo”, dijo Biden, quien se convirtió en presidente en 2021.
Biden dijo que las fuerzas estadounidenses llevaron a cabo el domingo una docena de ataques de precisión dentro de Siria dirigidos a campamentos y operativos del grupo militante Estado Islámico.
“Es un momento de oportunidad histórica para el sufrido pueblo de Siria de construir un futuro mejor para su orgulloso país. También es un momento de riesgo e incertidumbre”, dijo Biden.
“Mientras todos nos preguntamos qué viene a continuación, Estados Unidos trabajará con nuestros socios y las partes interesadas en Siria para ayudarles a aprovechar una oportunidad y gestionar el riesgo”, agregó.
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