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Al menos 158 personas han muerto en el peor desastre de inundaciones de España en generaciones mientras los rescatistas luchan contra las probabilidades para encontrar sobrevivientes.
El jueves, más de 1.200 trabajadores, con la ayuda de drones, fueron desplegados en la misión de rescate mientras las lluvias continuaban amenazando partes del país.
“Ahora mismo, lo más importante es salvar tantas vidas como sea posible”, dijo el primer ministro Pedro Sánchez a las víctimas en una visita a las comunidades afectadas.
Pero en algunas de las ciudades más afectadas en las inundaciones del martes por la noche, las personas tuvieron que encargarse de recuperar los cuerpos del barro y los escombros.
Se registraron al menos 155 muertes en Valencia, mientras que otras dos se registraron en Castilla-La Mancha, en la provincia al oeste, y otra, un hombre británico, en Andalucía.
En la ciudad de Paiporta, Valencia, donde un río se desbordó, hasta ahora se han registrado al menos 40 muertes.
“Todos conocemos a alguien que ha muerto”, dijo el farmacéutico Miguel Guerrilla, parado afuera de su farmacia que ha sido cubierta de lodo espeso.
“Es una pesadilla”.
El jueves, la BBC vio funerarias y furgonetas fúnebres recuperando cuerpos de la calle, mientras en las carreteras cercanas, los autos arrastrados por la marejada de la tormenta estaban apilados unos encima de otros.
Los automovilistas han relatado el horror de quedar atrapados por las mareas violentas el martes, que convirtieron autopistas y calles en ríos; muchos de los sobrevivientes se subieron a árboles o puentes para escapar.
El farmacéutico Miguel evaluando la destrucción en su tienda el jueves en Paiporta, Valencia [BBC]
La fuerza de las inundaciones arrastró autos – los residentes están teniendo que lidiar con la limpieza [Reuters]
Las autoridades no han revelado el número de personas aún desaparecidas, pero dijeron que son “muchas”, a medida que el número de muertos aumentó en otros 60 el jueves.
Más de 90 muertes se registraron el miércoles solo en las secuelas inmediatas de las lluvias torrenciales e inundaciones repentinas, que afectaron principalmente a Valencia, así como a Castilla-La Mancha y hasta el sur, en Málaga.
La ciudad de Chiva, cerca de Valencia, recibió el equivalente a un año de lluvias en solo ocho horas, según la agencia meteorológica española Aemet.
A medida que se emitieron nuevas advertencias de lluvia para el sur y el este del país el jueves, el rey Felipe VI advirtió que la emergencia “todavía no ha terminado” y el primer ministro Sánchez instó a los ciudadanos a buscar refugio cuando sea necesario.
Mientras tanto, en las áreas afectadas por las inundaciones, cientos de personas se están refugiando en alojamientos temporales y comenzando la tarea lenta y ardua de despejar calles y recuperar hogares y negocios.
Muchas carreteras y la red ferroviaria que conecta a Valencia con el resto de España siguen cortadas.
El jueves, España comenzó un período oficial de luto nacional de tres días con banderas a media asta en edificios gubernamentales y se guardaron momentos de silencio.
La indignación pública está creciendo por cómo un país europeo desarrollado parecía no haber advertido a muchas comunidades del peligro de las inundaciones a tiempo.
Se han planteado preguntas sobre si los servicios de gestión de desastres emitieron alertas demasiado tarde.
La agencia de protección civil, desplegada durante desastres nacionales, no emitió una alerta hasta las 20:15 del martes por la noche, hora local, momento en el cual varios lugares en Valencia ya habían estado inundados durante horas.
Las autoridades han calificado las lluvias y las inundaciones como “sin precedentes”.
Hay muchos factores que contribuyen a las inundaciones, pero una atmósfera cada vez más cálida causada por el cambio climático hace que las lluvias extremas sean más probables.
Una vista aérea de la destrucción y las inundaciones cerca de Valencia el jueves [Reuters]
Los investigadores del clima han identificado la causa principal probable de las intensas lluvias como una “gota fría” – un evento meteorológico natural que golpea a España en otoño e invierno cuando el aire frío desciende sobre aguas más cálidas en el Mediterráneo.
Sin embargo, el aumento de las temperaturas globales ha provocado que las nubes transporten más lluvia, dijeron científicos a la BBC.
El mundo ya se ha calentado aproximadamente 1,1 grados Celsius desde que comenzó la era industrial y las temperaturas seguirán aumentando a menos que los gobiernos de todo el mundo hagan recortes drásticos en las emisiones.
“Sin lugar a dudas, estas precipitaciones explosivas fueron intensificadas por el cambio climático”, dijo la doctora Friederike Otto, de Imperial College London, quien lidera un grupo internacional de científicos que tratan de comprender el papel que desempeña el calentamiento en este tipo de eventos.
El número de muertos es el peor por inundaciones en España desde 1973, cuando se estimó que al menos 150 personas murieron en las provincias del sureste de Granada, Murcia y Almería.
[BBC]