“Vivimos donde tú vacacionas.”
Se ha convertido en una frase común entre los floridanos de nacimiento y los recién llegados que quieren presumir a amigos que viven en climas más fríos. Pero quizás nadie encarne esa expresión más que los empleados del Sandpearl Resort.
En su viaje de Dunedin a Clearwater Beach, Pira Pong “Manning” Chanpuang contempla las vistas de las cristalinas aguas azules del Golfo de México. En su camino para registrar su entrada, pasa por el grandioso vestíbulo con sus relucientes pisos de mármol y enormes ventanales que dan a la zona de la piscina.
“Es una imagen de un millón de dólares, y la veo todos los días”, dijo. “No puedo pedir más que eso.”
Chanpuang, de 61 años, comenzó hace casi nueve años como valet de noche. En solo cinco meses ascendió al puesto de botones. Antes de eso, nunca había trabajado en un hotel.
Eso no es inusual en el Sandpearl, según el gerente general Eric Waltz.
“Lo que busco no es necesariamente la experiencia, sino ¿tienen buen contacto visual? ¿Son personas sonrientes, amigables, felices? ¿Son personas hospitalarias?”
Cada nuevo recluta pasa por un programa de entrenamiento de un mes para adaptarse.
Lucía Knapp, de 35 años, comenzó a trabajar como agente de recepción hace 10 meses. A pesar de tener mucho que aprender, ha podido aprender todo rápidamente con el apoyo de sus superiores y compañeros, dijo. Espera algún día ascender a un cargo gerencial.
“Todos a mi alrededor definitivamente me motivan a hacerlo mejor”, dijo. “Saber que tengo ese tipo de equipo y gerencia me hace querer venir a trabajar todos los días”.
El énfasis en el trabajo en equipo viene desde arriba, dijo Ally Currier, directora de recursos humanos. Todos ayudan a todos.
“Verás a Eric en el fregadero si necesitan ayuda”, dijo. “No importa que sea el gerente general.”
El trabajo duro no pasa desapercibido en el Sandpearl. Aquellos que se esfuerzan por encima y más allá tienen la oportunidad de ser nombrados como empleado del mes o empleado del año. El buen trabajo también se recompensa con dólares de arena, una especie de moneda interna del resort que se puede canjear por premios como tratamientos de spa o cena para dos en Caretta, el restaurante de alta cocina del hotel.
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El mejor premio de todos, sin embargo, es ver las sonrisas en los rostros de los huéspedes, dijo Chanpuang. Espera con ilusión ver a los clientes habituales que regresan año tras año.
Nunca olvidará cuando uno de los huéspedes más jóvenes le dibujó un retrato y se lo entregó en el vestíbulo. La madre del niño le dijo que sus hijos siempre le preguntan cuándo pueden regresar al Sandpearl para ver a Manning.
“Se sienten como familia para mí ahora”, dijo. “Es algo bastante gratificante de encontrar en un trabajo. Simplemente te hace sentir bien.”
Sandpearl Resort LLC
Ubicación: Clearwater Beach
Empleados: 250
Sitio web: www.opalcollection.com/sandpearl/
Comentarios de los empleados: “Aprecio lo que hago y tengo jefes que muestran que se preocupan por nosotros al chequear cómo estamos. También me encanta que el resort nos cuide bien con beneficios de tiempo completo, eventos y simplemente siendo amables. Al caminar por el trabajo, soy recibido por rostros sonrientes. Tener empleadores considerados y compañeros de trabajo geniales contribuye en gran medida a que el Sandpearl sea un gran ambiente”.
“Disfruto trabajar con el liderazgo y los empleados y también se me ha dado la oportunidad de hacer lo que siempre he querido hacer en cuanto a una carrera aquí en el Sandpearl”.
“Incluso cuando cometo errores, me enseñan adecuadamente cómo hacer las cosas bien y se me anima a hacer preguntas y seguir aprendiendo.”