El Director de Inteligencia Nacional aparentemente fue sorprendido cuando el Reino Unido exigió que Apple abriera una puerta trasera de encriptación, y dice que abogados y otras agencias están trabajando en el caso.
Para evitar tener que cumplir con la demanda legalmente vinculante pero totalmente secreta del gobierno del Reino Unido, Apple desactivó cierta encriptación de extremo a extremo en el país. La demanda sin precedentes del Reino Unido de acceder a todos los datos encriptados de los usuarios provocó controversia en todo el mundo, incluida una respuesta bipartidista en los Estados Unidos.
Los senadores Ron Wyden (D) del Comité de Inteligencia del Senado y Andy Biggs (R) del comité de Justicia de la Cámara, escribieron a Tulsi Gabbard, la nueva Directora de Inteligencia Nacional sobre el problema. Gabbard ha respondido, diciendo que a los Estados Unidos no se le informó de la orden secreta, y expresando su “grave preocupación” por que el Reino Unido exija datos sobre ciudadanos estadounidenses.
En su respuesta completa a los senadores, Gabbard señala que el Reino Unido pudo obligar a Apple a no revelar la existencia de la orden. Ella dice que se enteró de la demanda a través de informes de prensa y ahora se está preparando para hablar con el gobierno del Reino Unido.
Específicamente, ha involucrado a un oficial senior de la Comunidad de Inteligencia para investigar, con la asistencia de las agencias FBI, NSA, DIA, DHS y CIA. Gabbard también ha dirigido abogados para examinar las implicaciones de las acciones del Reino Unido en términos del acuerdo bilateral Cloud Act al que ambos, el Reino Unido y los Estados Unidos, son parte.
“Tras una revisión inicial del Acuerdo bilateral CLOUD Act entre EE. UU. y el Reino Unido, el Reino Unido puede no emitir exigencias de datos de ciudadanos, nacionales o residentes permanentes legales de EE. UU. (‘personas de EE. UU.’), ni está autorizado a exigir los datos de personas ubicadas dentro de los Estados Unidos,” dice Gabbard en su respuesta.
“Nuestras relaciones de inteligencia con socios extranjeros son de vital importancia para nuestra seguridad nacional,” continuó, “sin embargo, mis obligaciones como Directora de Inteligencia Nacional incluyen proteger tanto la seguridad de nuestro país como los derechos conferidos por Dios de los ciudadanos estadounidenses consagrados en la Constitución de los EE. UU.”
¿Qué sucede a continuación?
La demanda del Reino Unido de una puerta trasera de espionaje en iOS en iPhones le habría permitido acceder a datos de ciudadanos en EE. UU. y en cualquier parte del mundo, además del Reino Unido. Ahora es probable que esto esté en contravención de los acuerdos del Reino Unido con los EE. UU.
Sin embargo, es posible que el objetivo del gobierno de ese país haya sido que Apple desactivara la encriptación en el Reino Unido todo el tiempo. Obtiene el acceso que desea a todos los ciudadanos del Reino Unido, pero no a los estadounidenses.
Sin embargo, forzar a Apple a desactivar la encriptación significa que la seguridad y la privacidad se debilitan para todos los usuarios que interactúan con el Reino Unido. En consecuencia, los usuarios de EE. UU. cuya encriptación de extremo a extremo permanezca intacta aún podrían verse comprometidos por actores malintencionados que accedan a través de cualquier contacto en el Reino Unido.
Si bien no aborda directamente esta posibilidad, los comentarios finales de la Directora Gabbard sobre la importancia de las relaciones de inteligencia se interpretarán como una amenaza. Es posible que EE. UU. reduzca o detenga el intercambio de datos de inteligencia con el Reino Unido.
Apple no ha comentado sobre la respuesta de la Directora, pero la empresa tampoco puede hacerlo legalmente. Sin duda está apelando contra la demanda en el Reino Unido, pero hasta que se resuelva esa apelación secreta, Apple debe cumplir o mantener desactivada la encriptación de extremo a extremo.