Los doctores dijeron que habían realizado una craneotomía en el presidente, un procedimiento en el que se quita parte del hueso quirúrgicamente del cráneo para tratar el sangrado y aliviar la presión. El hueso es luego reemplazado. Lula está siendo monitoreado en la unidad de cuidados intensivos y está “bien”, añade el comunicado del hospital. También dijo que no hubo complicaciones durante la cirugía. Lula se resbaló en el baño del Palacio de Alvorada el 19 de octubre y golpeó la parte trasera de su cabeza. Tuvo que ponerse cinco puntos y, por consejo de sus médicos, canceló su viaje planeado a Rusia para una cumbre de los países del Brics. Volvió a sus deberes completos días después. Lula ha estado en el poder desde el 1 de enero de 2023 después de vencer por poco al titular, Jair Bolsonaro, en una elección amargamente disputada. Durante la campaña electoral, a menudo bromeaba diciendo que tenía “la energía de un joven de 30 años”.
