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El fondo soberano de Arabia Saudita ha exigido el desalojo de la familia del magnate europeo de bienes raíces en quiebra René Benko de su palacete en Innsbruck, a medida que busca recuperar millones en pérdidas por el colapso del Grupo Signa.
En una carta vista por el Financial Times, abogados actuando en nombre de una subsidiaria del Fondo de Inversión Pública de Arabia Saudita (PIF) escribieron a los fiduciarios de la Fundación Laura, una entidad con sede en Liechtenstein que fue utilizada por Benko para manejar su riqueza personal, exigiendo que cesara todos los pagos a los beneficiarios.
“Exigimos con urgencia que la Fundación Laura tome todas las medidas necesarias para remover de inmediato a la familia Benko de la propiedad ubicada en Viller Steig, Innsbruck-Igls, que es propiedad de una subsidiaria de la Fundación Laura”, reza la carta fechada el 27 de enero.
La demanda es una clara ilustración de la caída de Benko.
En la cúspide de su éxito, era uno de los empresarios de bienes raíces más ricos de Europa, elogiado por altos políticos en Europa de habla alemana.
Por un tiempo, parecía que pocos inmuebles de lujo estaban más allá de su alcance: con inversores asociados, adquirió Selfridges en Londres, KaDeWe en Berlín y el edificio Chrysler en Nueva York.
La casa en Viller Steig 2, situada en una meseta con vistas a la ciudad austriaca occidental de Innsbruck, era la residencia principal de Benko y es una de las propiedades más ostentosas de los Alpes.
Fue construida por Benko en 2018, después de la demolición de un gran hotel en el lugar.
Su imperio inmobiliario alimentó un estilo de vida conspicuamente lujoso, con casas de lujo repartidas por toda Europa, que duró hasta el colapso de Signa hace 16 meses.
La casa en Viller Steig 2 fue construida por Benko en 2018, después de la demolición de un gran hotel en el lugar © Kerstin Joensson/AFP/Getty Images
Horas antes de que comenzara el colapso de Signa en noviembre de 2023, se vio a Benko tomando su avión privado personal a Barcelona desde su casa en Austria para una tarde de compras con su esposa.
Los inversionistas de Signa ahora deben miles de millones. El PIF saudita es uno de los acreedores más grandes. En total, el PIF le debe cientos de millones a las entidades colapsadas de Signa.
Los administradores han advertido a los acreedores que es probable que solo recuperen una fracción de su dinero.
La naturaleza dispersa del Grupo Signa, que estaba compuesto por cientos de compañías individuales, sin cuentas centralmente consolidadas, ha complicado los esfuerzos de recuperación.
En particular, se está investigando en qué medida los propios asuntos financieros personales de Benko estaban enredados con las entidades del grupo.
El mes pasado, Benko fue arrestado por la policía austriaca.
Los fiscales lo acusan de hacer declaraciones inexactas durante los procedimientos de insolvencia en un intento de malversar activos.
La Fundación Laura, nombrada en honor a la hija de Benko, también está en el centro de su investigación. Alegan que mantiene el control de la fundación a distancia y la utilizó para ocultar la verdadera magnitud de su riqueza.
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“Escondió activos y excluyó riqueza que se mantenía en la fundación de las autoridades judiciales, el administrador y los acreedores”, dijeron en un comunicado, señalando pruebas recopiladas en una investigación de varios meses que incluyó vigilancia telefónica.
El Financial Times informó el año pasado que una compañía del Grupo Signa transfirió más de €300mn a dos entidades controladas por esa fundación antes de la insolvencia.
El abogado de Benko no respondió a una solicitud de comentarios.
Su abogado dijo en diciembre que Benko niega los cargos en su contra. “Cualquier acusación en su contra puede aclararse como substancialmente incorrecta”, dijo.
El PIF saudita se negó a hacer comentarios.
Reporte adicional por Ahmed Al Omran
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