ALGIER, Argelia (AP) — Mientras Francia celebró el aniversario de la victoria sobre los nazis el miércoles, Argelia conmemoró un aniversario más sombrío: La represión por parte de las fuerzas coloniales francesas contra activistas de la independencia argelina el mismo día hace 79 años.
Ambos eventos tuvieron lugar el 8 de mayo de 1945.
En París, el presidente francés Emmanuel Macron colocó una corona de flores el miércoles en la llama eterna debajo del Arco del Triunfo de la era napoleónica, honrando a los caídos luchando contra los nazis y marcando el fin de la Segunda Guerra Mundial en Europa.
En el momento de la guerra, Argelia era la joya de la corona en el imperio colonial francés, y los soldados argelinos estaban entre los enviados a luchar por Francia en Europa. El fin de la Segunda Guerra Mundial desató movimientos independentistas en los antiguos imperios francés y británico.
En Argel el miércoles, se estaban llevando a cabo ceremonias para honrar a los manifestantes que salieron a las calles en las ciudades de Guelma, Sétif y Kherrata para pedir libertad del dominio francés.
“En este día recordamos las masacres del 8 de mayo de 1945, cometidas por el colonizador con extrema brutalidad y crueldad, para reprimir un creciente movimiento de activistas nacionales que había derivado en manifestaciones masivas expresando la revuelta del pueblo argelino y su aspiración a la libertad y emancipación,” dijo el presidente argelino Abdelmadjid Tebboune en un comunicado.
Eran comentarios inusualmente fuertes del líder argelino, y un recordatorio de las tensiones persistentes con Francia más de 60 años después de que Argelia obtuviera su independencia en una dolorosa guerra de 1954-1962.
Argelia y Francia tienen hoy estrechos lazos económicos, de seguridad y energéticos, pero la cuestión de la justicia histórica sigue siendo un tema delicado.
Se espera que Tebboune lo plantee en un viaje a Francia más adelante este año. El tema de la memoria histórica “se mantendrá en el centro de nuestras preocupaciones hasta que disfrute de un tratamiento objetivo que haga justicia a la verdad histórica,” dijo Tebboune en su comunicado de esta semana.
Durante una visita a Argelia en 2022, Macron estableció una relación cercana con Tebboune y acordó crear una comisión de historiadores de ambos países para hacer propuestas de reconciliación. La comisión lanzó propuestas este año, incluida la devolución de documentos y artefactos de los archivos franceses a Argelia.
Los políticos argelinos también han solicitado reparaciones financieras por las pruebas nucleares francesas en el Sáhara — y, lo más importante, una disculpa oficial de Francia por los crímenes de la era colonial.
Como primer líder francés nacido después de esa época, Macron ha buscado enfrentar los errores pasados de su país mientras se dirige hacia una nueva era de relaciones con las antiguas colonias. Pero ha enfrentado críticas en casa, en medio del creciente apoyo público a nacionalistas de extrema derecha que defienden las quejas de algunos descendientes franceses de colonizadores.