La violación conyugal esta prohibida en más de 100 paizes, incluyendo Gran Bretaña que la criminalizó en 1991. Pero India sigue siendo uno de los tres docena de países – junto con Pakistán, Afganistán y Arabia Saudita – donde la ley sigue vigente. Un número de peticiones han sido presentadas en los últimos años pidiendo la eliminación de la Sección 375 del Código Penal Indio, que ha estado en vigencia desde 1860. Las Naciones Unidas, Human Rights Watch y Amnistía Internacional también han expresado preocupaciones sobre la negativa de India a criminalizar la violación conyugal. El gobierno Indio, grupos religiosos y activistas de los derechos de los hombres se han opuesto a cualquier plan de enmendar la ley diciendo que el consentimiento para el sexo está “implicado” en el matrimonio y que una esposa no puede retractarse más tarde. Los tribunales han emitido fallos contradictorios, a veces permitiendo que un esposo sea juzgado por violación mientras que en otros casos desestiman la petición. El caso llegó al Tribunal Supremo después de que el Tribunal Superior de Delhi en 2022 emitió un veredicto dividido. El tribunal superior comenzó las audiencias en agosto.