Dolutegravir, un tratamiento contra el VIH – Uso justo
Un informe sin precedentes descubrió que modificar la lista de ingredientes o los métodos de fabricación de medicamentos ampliamente utilizados puede reducir realmente las emisiones de carbono.
Encontraron una reducción de 26 millones de toneladas, suficiente para neutralizar la huella de carbono de toda la ciudad de Ginebra durante una década. Lo mejor de todo es que ya está sucediendo, de hecho, casi está hecho: esas emisiones ya se han salvado.
El tratamiento salvavidas del VIH dolutegravir (DTG) es utilizado por 24 millones de personas en todo el mundo.
Hoy, más de 110 países de bajos y medianos ingresos han adoptado el DTG como la opción de tratamiento preferida. La rápida licencia voluntaria del medicamento, incluyendo su versión pediátrica, a más de una docena de fabricantes genéricos, redujo significativamente los precios, y se estima que se salvarán 1,1 millones de vidas de muertes relacionadas con el VIH/SIDA para 2027.
Su predecesor, efavirenz, contenía 1200 miligramos de ingrediente activo entre los tres compuestos activos presentes, mientras que el DTG contiene 650 miligramos de apenas un compuesto. Esta pequeña diferencia, literalmente medible en unidades de grapas por peso, fue suficiente para cambiar la huella de carbono de la medicación en un factor de 2.6.
El increíble descubrimiento se realizó en un informe reciente de Unitaid, una asociación público-privada global que invierte en nuevos productos y soluciones de salud para países de bajos y medianos ingresos, llamado Miligramos a Megatoneladas, y es la primera investigación publicada que compara las huellas de carbono entre medicamentos comúnmente utilizados.
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“Esta magnitud de reducción de la huella de carbono supera muchos logros difíciles de alcanzar en la mitigación del cambio climático en el sector de la salud y en otros sectores”, escriben los autores del informe.
A la velocidad a la que se produce el DTG, desde que entró en producción y régimen de tratamiento en 2017, se han emitido 2.6 millones de toneladas menos de CO2 a la atmósfera cada año que si efavirenz siguiera siendo la opción de tratamiento estándar.
Health Policy Watch informa que las emisiones de carbono del sector médico global representan aproximadamente el 5% de las emisiones globales de carbono y son mayores que las emisiones de muchos países grandes, y 2.5 veces más que la aviación.
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“Este informe demuestra que podemos lograr mejoras significativas en la salud mientras también avanzamos en la reducción de las emisiones de carbono. Al adoptar prácticas innovadoras y priorizar la sostenibilidad, podemos garantizar que medicamentos como el DTG no solo sean efectivos, sino también ambientalmente responsables”, dijo Vincent Bretin, Director del Equipo de Resultados y Clima de Unitaid a Health Policy Watch.
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