Con aplausos a todo pulmón de sus seguidores, el ex presidente de Zambia, Edgar Lungu, ha anunciado que está volviendo a la política. Se retiró de la política en 2021 después de sufrir una aplastante derrota en una elección presidencial. Después de seis años en el cargo, el país quedó sumido en deudas y con una economía precaria.
Pero ahora, el Sr. Lungu está aprovechando la creciente insatisfacción con su sucesor, Hakainde Hichilema. Su regreso se había anticipado durante mucho tiempo, pero esta fue la primera vez que se hizo un anuncio formal. “Estoy listo para luchar desde el frente, no desde atrás, en defensa de la democracia. Aquellos que estén dispuestos a esta pelea, por favor, acompáñenme, estoy listo para cualquier cosa”, dijo el Sr. Lungu a sus seguidores el pasado sábado. Hablaba en un servicio conmemorativo al ex presidente y líder de su partido, el Frente Patriótico (PF), Michael Sata, quien murió en el cargo en 2014.
Desde que el Sr. Lungu perdió el poder hace dos años, ha habido una disputa dentro del PF sobre quién debería liderar el partido, lo que ha llevado a un litigio en los tribunales. La entrada del Sr. Lungu podría agravar las tensiones y prolongar la batalla legal, ya que actualmente hay otra persona, Miles Sampa, que afirma haber sido elegido como presidente del PF en una reunión reciente. Algunos, incluido el ex presidente, han acusado al gobierno de avivar las divisiones, acusación que éste niega.
El Sr. Lungu “goza del derecho constitucional y democrático de participar en la esfera política de nuestro país y, si así lo desea, es bienvenido de vuelta en la arena política”, dijo el Ministro de Información, Cornelius Mweetwa, a la emisora pública de Zambia, ZNBC.
El Sr. Hichilema ganó las elecciones de 2021, su sexto intento de acceder a la presidencia, con el 59% de los votos, con la esperanza de que abordaría los problemas económicos del país. Sin embargo, esas altas expectativas están tardando mucho en cumplirse y la paciencia se está agotando.
El presidente ha logrado negociar un acuerdo de rescate para el país rico en cobre con el Fondo Monetario Internacional. También ha logrado reestructurar acuerdos de préstamos con acreedores chinos y otros.
El Sr. Hichilema argumenta que heredó un país en profundos problemas económicos, con un sector minero de vital importancia que lucha por mantenerse. Pero el consumidor común se enfrenta a precios muy altos de alimentos básicos y combustible, lo que dificulta la vida de muchos y genera frustración con el liderazgo político.
Esta semana, el gobierno también fue criticado por su “creciente intolerancia hacia la disidencia” por 13 destacadas organizaciones de la sociedad civil. En un comunicado conjunto, afirmaron que existe un “espacio cada vez más reducido para la libertad de expresión y de reunión en el país”.
La presidencia ha argumentado en el pasado que respeta los derechos humanos y no interfiere en las operaciones de la policía.
El mes pasado, se le advirtió al Sr. Lungu que no hiciera ejercicios de jogging en público, ya que la policía describió sus entrenamientos semanales como “activismo político”. Sus corridas del sábado con miembros del público y seguidores del PF estaban atrayendo mucha atención. Se le pidió al ex presidente que buscara la aprobación policial para futuros eventos de jogging.