LONDRES (AP) — Una ex líder de Escocia reconoció el miércoles que eliminó mensajes de WhatsApp enviados durante la pandemia de COVID-19, pero insistió en que cualquier información relevante sobre cómo se llevó a cabo la formulación de políticas está disponible en registro público.
Nicola Sturgeon dijo que no usó mensajes informales como WhatsApp para tomar decisiones. Aunque Escocia es parte del Reino Unido, su gobierno tiene poderes sobre asuntos relacionados con la salud pública.
“Durante la pandemia no hice un uso extensivo de mensajería informal y ciertamente no la utilicé para tomar decisiones,” dijo en Edimburgo durante su testimonio al Comité de Inquriy del Reino Unido, que a veces fue emotivo.
Sturgeon, de 53 años, se convirtió en primera ministra en 2014 después de que Escocia votara por permanecer parte del Reino Unido en un referéndum y estuvo en el cargo hasta su sorpresiva renuncia en 2023.
Sturgeon recibió elogios por su manejo de la pandemia. Se le consideró ampliamente que estuvo al tanto de las cosas y clara en sus pronunciamientos públicos durante la pandemia, especialmente en comparación con el ex primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson, quien lideró la política en Inglaterra y quien también compareció ante la investigación a finales del año pasado.
En su testimonio, Sturgeon se mostró entre lágrimas y le dijo al comité que hay una “gran parte” de ella que desearía no haber sido primera ministra durante la pandemia.
Su reputación ha recibido un golpe en los últimos meses, especialmente después de su arresto en junio pasado en el marco de una investigación policial sobre las finanzas del Partido Nacional Escocés, pro-independencia, en el gobierno. No se le ha imputado cargos y ella insiste en que no ha hecho nada malo.
La reputación de Sturgeon ha sido afectada aún más por la reciente revelación de que sus mensajes de WhatsApp habían sido eliminados, lo que ha llevado a preguntas sobre su confianza o si tiene algo que ocultar.
Aunque Sturgeon admitió que WhatsApp se había vuelto “demasiado común” como medio de comunicación dentro del gobierno escocés, dijo que intercambiaba mensajes con no más de un “puñado” de personas, y que no era miembro de ningún grupo.
También dijo que eliminó mensajes, siguiendo el consejo oficial, y que los puntos “esenciales” se registraron en el registro corporativo.
“Desde 2007, operé sobre la base de un consejo, indicando que los mensajes, los asuntos relacionados con el gobierno, no deberían mantenerse en un teléfono que pudiera perderse o ser robado, e inseguro de esa manera, sino que deberían registrarse adecuadamente a través del sistema,” dijo.
La ex primera ministra dijo que siempre había asumido que habría una investigación pública y se disculpó por cualquier falta de claridad en una sesión informativa pública en agosto de 2021, donde dijo que sus mensajes de WhatsApp se entregarían a pesar de saber que ya habían sido eliminados.
La semana pasada, el sucesor de Sturgeon como primer ministro, Humza Yousaf, ofreció una disculpa “incondicional” por el “francamente pobre” manejo del gobierno escocés de solicitudes de mensajes de WhatsApp. Ha anunciado una revisión externa sobre el uso de mensajería móvil por parte del gobierno.
La investigación está dividida en cuatro llamados módulos, y la fase actual se centra en la toma de decisiones políticas en torno a desarrollos importantes, como el momento de los confinamientos. Aunque los gobiernos descentralizados de Escocia, Gales e Irlanda del Norte tenían independencia en la formulación de políticas, el Reino Unido en su conjunto se movió como uno solo, especialmente cuando se trataba de decisiones de confinamiento.
Se espera que la investigación, dirigida por la jueza jubilada Heather Hallett, tarde tres años en completarse, aunque se publicarán evaluaciones provisionales. Johnson aceptó a fines de 2021 realizar una investigación pública tras la fuerte presión de las familias en duelo, que han criticado la evidencia que ha surgido sobre sus acciones.