Algunos economistas han advertido que las propuestas de Trump sobre el comercio supondrían un “shock” para la economía del Reino Unido.
Ahmet Kaya, economista principal del Instituto Nacional de Investigación Económica y Social (Niesr), dijo que podría ser “uno de los países más afectados” bajo tales planes.
Se estima que el crecimiento económico en el Reino Unido se ralentizaría al 0,4% en 2025, frente a una previsión del 1,2%.
Katrina Ell, directora de investigación económica en Moody’s Analytics, dijo: “Las políticas comerciales globales de Trump están causando particular angustia en Asia, dada la sólida plataforma proteccionista en la que se han comprometido aranceles más agresivos sobre las importaciones a Estados Unidos”.
La postura más aislacionista de Trump en política exterior también ha planteado dudas sobre su disposición a defender a Taiwán contra una posible agresión de China.
La isla autónoma es un importante productor de chips de computadora, que son cruciales para la tecnología que impulsa la economía global.
En China continental, el Índice Compuesto de Shanghai terminó el día con una caída del 0,1%, mientras que el Hang Seng de Hong Kong cayó alrededor del 2,23%.
La agenda de recorte de impuestos de Trump ha sido ampliamente bienvenida por las grandes corporaciones en EE. UU.
“Deberíamos ver políticas proempresariales y recortes de impuestos, lo que posiblemente genere un aumento de la inflación y menos recortes de tasas”, dijo Jun Bei Liu, gerente de cartera en Tribeca Investment Partners.
Los inversores también tienen otros temas clave en los que centrarse esta semana.
El jueves, la Reserva Federal de EE. UU. anunciará su última decisión sobre las tasas de interés.
Los comentarios del jefe del banco central, Jerome Powell, serán observados de cerca en todo el mundo.
El viernes, se espera que altos funcionarios chinos revelen más detalles sobre los planes de Pekín para abordar la desaceleración de la segunda economía más grande del mundo.
