Nigel Farage, el defensor del Brexit y disruptor serial de la política británica, anunció planes el lunes para postularse como candidato en las elecciones generales de Gran Bretaña el próximo mes, lo que supone un nuevo revés para las perspectivas del primer ministro, Rishi Sunak. El anuncio sorpresa de Farage, quien representa un movimiento de extrema derecha insurgente que aboga por limitar la inmigración, amenaza con trastornar la campaña al quitar votos al Partido Conservador. Farage dijo el mes pasado que no buscaría un escaño parlamentario porque quería priorizar el apoyo a la campaña electoral de Donald J. Trump en los Estados Unidos. Sin embargo, el lunes Farage cambió de opinión, diciendo que asumiría el liderazgo de Reform U.K. durante los próximos cinco años y se postularía para un escaño en el Parlamento. Anunció que se presentaría en Clacton, una zona costera donde el apoyo al Brexit ha sido fuerte. La noticia llega en vísperas de uno de los mayores eventos de la campaña electoral para las elecciones generales de Gran Bretaña hasta la fecha: un debate televisado el martes por la noche entre Sunak y Keir Starmer, líder del Partido Laborista de la oposición. Con los Conservadores rezagados en las encuestas de opinión y luego de un comienzo propenso a errores en la campaña, Farage ha sido cada vez más vocal al predecir una derrota significativa para el Partido de Sunak. En una entrevista con The Sunday Times de Londres durante el fin de semana, Farage dijo que había nombrado a su partido Reform U.K. en honor al partido insurgente canadiense del mismo nombre. Desde 2016, Farage ha sido vocal en su apoyo a Trump, y la semana pasada describió las condenas en su contra por 34 cargos como una “vergüenza”.