“
WASHINGTON (AP) — La economía de los EE. UU. creció a un preocupante ritmo anual del 1.3% desde enero hasta marzo, informó el gobierno el jueves en una rebaja con respecto a su estimación anterior. El gasto del consumidor aumentó pero a un ritmo más lento de lo que se pensaba anteriormente.
El Departamento de Comercio había estimado anteriormente que el producto interno bruto (PIB) de la nación —la producción total de bienes y servicios— se expandió a una tasa del 1.6% el trimestre pasado.
El crecimiento del PIB del primer trimestre marcó una fuerte desaceleración desde la enérgica tasa del 3.4% en los últimos tres meses de 2023.
Pero la desaceleración del último trimestre se debió principalmente a dos factores — un aumento en las importaciones y una reducción en los inventarios empresariales — que tienden a fluctuar de un trimestre a otro. El informe del jueves mostró que las importaciones restaron más de 1 punto porcentual al crecimiento del último trimestre. Una reducción en los inventarios empresariales restó casi medio punto porcentual.
El gasto del consumidor, que impulsa alrededor del 70% del crecimiento económico, aumentó a una tasa anual del 2%, frente al 2.5% en la primera estimación y a tasas de más del 3% en los dos trimestres anteriores. El gasto en bienes como electrodomésticos y muebles cayó a un ritmo anual del 1.9%, la mayor caída trimestral desde 2021. Pero el gasto en servicios aumentó a un saludable ritmo del 3.9%, el más alto desde mediados de 2021.
La economía de EE. UU. —la más grande del mundo— ha mostrado una durabilidad sorprendente desde que la Reserva Federal comenzó a subir las tasas de interés hace más de dos años en su intento por controlar el peor brote de inflación en cuatro décadas. Se esperaba que los costos de endeudamiento mucho más altos resultantes desencadenaran una recesión. Sin embargo, la economía ha seguido creciendo y los empleadores han seguido contratando.
Los economistas han dicho que no estaban demasiado preocupados por el descenso en el crecimiento del primer trimestre, aunque varios indicios han sugerido que la economía podría estar debilitándose. Más estadounidenses, por ejemplo, están retrasándose en el pago de sus tarjetas de crédito. La contratación se está desacelerando, con las empresas publicando menos ofertas de trabajo. Más compañías, incluidas Target, McDonald’s y Burger King, están destacando recortes de precios o ofertas más económicas para intentar atraer a los consumidores financieramente apretados.
Y con las encuestas mostrando que alquileres, alimentos y gasolina más costosos están enfureciendo a los votantes a medida que la campaña presidencial se intensifica, Donald Trump ha tratado de atribuir la culpa al presidente Joe Biden en un intento de amenazar la reelección del presidente.
Se esperaba que el crecimiento de la economía recibiera un impulso de tasas de interés más bajas este año. Después de haber elevado su tasa de referencia a un máximo de dos décadas el año pasado, la Fed había señalado que planeaba recortar las tasas tres veces en 2024. Sin embargo, el banco central ha retrasado repetidamente el inicio de los recortes de tasas.
La mayoría de los traders de Wall Street no esperan el primer recorte de tasas hasta noviembre, según la herramienta CME FedWatch. Los recortes de tasas se han retrasado porque la inflación, después de caer constantemente a fines de 2022 y la mayor parte de 2023, sigue estancada por encima del nivel objetivo del 2% de la Fed.
El informe del jueves fue la segunda de las tres estimaciones gubernamentales del crecimiento del PIB del primer trimestre. El Departamento de Comercio emitirá su primera estimación del desempeño económico del trimestre actual el 25 de julio. Una herramienta de pronóstico emitida por el Banco de la Reserva Federal de Atlanta sugiere que el crecimiento económico está en camino de acelerarse a una tasa anual del 3.5% de abril a junio.
“