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Las autoridades italianas están investigando al capitán del yate Bayesian por su papel en su hundimiento la semana pasada en Sicilia, que llevó a la muerte del magnate tecnológico británico Mike Lynch y otras seis personas, según uno de los abogados involucrados.
James Cutfield, el capitán de nacionalidad neozelandesa de la lujosa embarcación, está siendo investigado por homicidio involuntario y por naufragio negligente, confirmó uno de sus abogados en un mensaje.
La investigación no implica ninguna culpa o negligencia por parte del capitán, pero es un paso formal necesario para que los fiscales que investigan los eventos continúen la investigación.
Las víctimas del hundimiento del Bayesian probablemente estaban dormidas o intentaron escapar cuando el yate de Lynch se hundió en cuestión de minutos durante mal tiempo, dijeron fiscales en Sicilia el sábado. El fiscal adjunto Raffaele Cammarano dijo a los periodistas que Cutfield había sido “muy colaborativo” al responder preguntas.
Los detalles sobre lo que le ocurrió a las víctimas no están del todo claros, dijo Cammarano la semana pasada. Los fiscales han dicho que están limitados en lo que pueden comunicar a la prensa para no perjudicar la investigación.
De los 22 pasajeros en el barco, 15 fueron rescatados el 19 de agosto. Además de Lynch, el presidente de Morgan Stanley International, Jonathan Bloomer, se encontraba entre las víctimas halladas sin vida.
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