El Canciller alemán Olaf Scholz partió hacia Uzbekistán temprano el domingo, donde planea concluir acuerdos sobre temas incluyendo migración durante su primera parada en un viaje de tres días por Asia Central. Scholz tiene previsto llegar a Samarkanda el domingo por la tarde donde se espera firme varios acuerdos con el Presidente de Uzbekistán Shavkat Mirziyoyev, incluyendo un acuerdo para facilitar la inmigración a Alemania de trabajadores cualificados uzbekos y la repatriación de uzbekos obligados a dejar el país. Luego se dirigirá a Kazajistán, el país más grande y económicamente más fuerte de la región, el lunes y martes. Allí asistirá a una cumbre con los cinco países ex repúblicas soviéticas de la región, incluyendo Kirguistán, Turkmenistán y Tayikistán, que están fuertemente influenciados por Rusia y China. Scholz tiene como objetivo ampliar las relaciones con estos países y firmó una asociación estratégica con ellos el año pasado, abarcando la economía, la energía, el clima y el medio ambiente. En Kazajistán, sus conversaciones se centrarán en el suministro de petróleo y gas a Alemania y también en las sanciones contra Rusia, ya que se acusa a Kazajistán de facilitar eludir estas sanciones. Desde el comienzo de la guerra total de Rusia contra Ucrania en febrero de 2022, Alemania ha buscado diversificar sus relaciones en la región, que anteriormente se centraban fuertemente en los lazos económicos con Rusia y China.