Los cuatro diputados de Plaid Cymru han respaldado llamados a un boicot deportivo y económico contra Israel por la guerra en Gaza. El grupo en Westminster del partido está apoyando una moción en la conferencia del partido que llama a Israel un “estado de apartheid” y lo acusa de “genocidio, limpieza étnica y crímenes de guerra”. Los miembros de Plaid decidirán si el partido debe respaldar los llamados cuando se reúnan en Cardiff más tarde. El principal enviado palestino al Reino Unido, Husam Zomlot, también se dirigirá a la conferencia el sábado por la tarde. En una entrevista con la BBC, el líder del partido, Rhun ap Iorwerth, insinuó una diferencia de opinión sobre el asunto, negándose a confirmar si personalmente respaldaba la moción. La moción propuesta por los miembros del partido en Ceredigion condena “en los términos más enérgicos” los “asesinatos de decenas de miles de palestinos, incluidos más de 10,000 niños, por parte del estado de Israel”. Critica la “violencia perpetrada por Hamas contra personas inocentes en Israel”, pero dice que “el régimen de apartheid cada vez más opresivo mantenido por el gobierno israelí hace menos probable una solución de dos estados para lograr una paz justa”. La moción dice que el gobierno del Reino Unido debería “expulsar al embajador de Israel”, prohibir la venta de armas a Israel, y que todos los miembros de Plaid deben apoyar un “boicot económico y cultural”. Eso incluiría a los equipos nacionales de deportes de Gales boicoteando el país. También dice que los consejos deberían desinvertir en empresas que “apoyan al estado de apartheid de Israel”. Ap Iorwerth dijo que Israel había actuado en contra del derecho internacional, pero se negó a apoyar llamados a un boicot personalmente. “Las personas tomarán diferentes posiciones en asuntos como los boicots”, dijo. “Esos ataques hace un año fueron horribles, y los condenamos. Necesitamos ver la liberación de los rehenes sobrevivientes, pero también necesitamos denunciar al estado de Israel”. Unas 1,200 personas – en su mayoría civiles israelíes – murieron en los ataques de Hamas del 7 de octubre. Desde entonces, unas 42,000 personas han muerto como parte de la ofensiva retaliatoria de Israel en Gaza, según el ministerio de salud dirigido por Hamas. La moción de Plaid cita a Amnistía Internacional, que en 2022 dijo que las leyes, políticas y prácticas de Israel contra los palestinos en Israel y los territorios ocupados equivalían a apartheid. Dijo que mantenía “un régimen institucionalizado de opresión y dominación de la población palestina en beneficio de los israelíes judíos”. En ese momento, el ministerio de exteriores de Israel acusó a Amnistía de reciclar “mentiras, inconsistencias y afirmaciones infundadas que provienen de conocidas organizaciones de odio antiisraelíes”. Los palestinos han acusado a Israel de genocidio en Gaza, lo cual el país ha negado. La relatora especial de derechos humanos de la ONU, Francesa Albanese, ha dicho que cree que Israel ha cometido “actos de genocidio”, mientras que la Corte Internacional de Justicia dictaminó en enero que el país debería “tomar todas las medidas para prevenir actos genocidas”.