El Crooked House, un pub en West Midlands, Inglaterra, que fue demolido el año pasado después de un incendio sospechoso, podría estar resurgiendo de entre las ruinas después de que a sus propietarios se les ordenará restaurar el pub a su antigua gloria torcida.
La taberna, conocida como “el pub más torcido de Gran Bretaña” por sus paredes y pisos inclinados, fue vendida a un desarrollador privado en julio de 2023. Alrededor de dos semanas después, el pub sufrió un incendio en un presunto ataque incendiario y los desarrolladores que lo habían comprado trajeron las excavadoras. Los lugareños estaban indignados. Con el apoyo de políticos locales, lanzaron una campaña pública para ver el edificio restaurado y que se responsabilizara a alguien por su destrucción.
Ahora, podrían estar un paso más cerca de que esos objetivos se conviertan en realidad. El Consejo de South Staffordshire, la autoridad local del área donde una vez se encontraba el pub, ordenó el martes a los propietarios reconstruir el pub en tres años, restaurándolo con materiales originales y manteniendo su carácter original.
El consejo dijo en un comunicado que había “estado en contacto con los propietarios desde la demolición, pero ha llegado a un punto en el que se considera necesaria una acción formal”. Un intento inicial de comunicarse con los propietarios por teléfono y correo electrónico no obtuvo respuesta.
El pub, ubicado en Himley, un pequeño pueblo al oeste de Dudley, no era un edificio protegido, lo que le habría dado protección legal. Pero se consideraba un “patrimonio” y estaba registrado en el Registro del Entorno Histórico como un edificio de importancia local, según el consejo.
Roger Lees, el líder del Consejo de South Staffordshire, dijo en un comunicado que se había dedicado “una enorme cantidad de tiempo y recursos” a investigar la demolición no autorizada del pub, y que la orden de ejecución no se había tomado a la ligera.
“Pero creemos que es justo responsabilizar a los propietarios, que demolieron el edificio sin consentimiento”, dijo. “Y estamos comprometidos a hacer lo que podamos para que la Crooked House sea reconstruida”.
El edificio, construido en 1765 como una granja, comenzó a inclinarse en el siglo XIX debido a la minería de carbón bajo sus cimientos. Durante generaciones, sus marcos de ventanas se inclinaban hacia un lado y sus paredes parecían inclinarse a un ángulo casi desafiante a la gravedad, deleitando tanto a los clientes como a los transeúntes.
A pesar de su aspecto tambaleante, el edificio era estructuralmente seguro después de ser reforzado con barras de acero y otros soportes. Pero su destino se había vuelto tan precario como su apariencia.
En los últimos años, el pub había enfrentado dificultades financieras al igual que muchos otros en todo el Reino Unido a raíz de la pandemia y en medio de una crisis de costos de vida. Los desarrolladores que compraron el edificio planeaban convertirlo en “usos alternativos”, dijeron las autoridades locales en ese momento. Luego, en agosto pasado, un incendio sospechoso estalló una noche de sábado destruyendo parcialmente el edificio. Antes de que los lugareños pudieran siquiera evaluar la situación, fue demolido.
El año pasado, la policía de Staffordshire dijo que había arrestado a seis personas bajo sospecha de conspiración para cometer incendio provocado, pero nadie ha sido acusado y esos sospechosos siguen en libertad condicional.
Marco Longhi, un miembro del Parlamento que representa el área donde se encontraba el pub, Dudley North, dijo que la demolición del querido pub “sacudió nuestra comunidad”.
“Así que es fantástica la noticia de que se haya emitido una orden de ejecución contra los propietarios por demolición sin consentimiento”, dijo el Sr. Longhi en un comunicado publicado en Facebook el martes.
Agregó que se requerirá que los propietarios “reconstruyan el lugar hasta su antigua gloria, y no descansaré hasta que la Crooked House sea reconstruida ladrillo por ladrillo”. El Sr. Longhi concluyó con una advertencia: “Que esto sirva como una advertencia para cualquiera que quiera lanzar un ataque contra nuestros sitios patrimoniales, no se saldrán con la suya”.
Los involucrados en la campaña de concienciación tenían esperanzas, pero también eran realistas ya que pasaría algún tiempo antes de que el pub fuera restaurado.
Marie Stokes, de 62 años, quien vive cerca en Wolverhampton, ha participado en protestas en el sitio desde la demolición del pub y dijo que estaba “feliz” al escuchar la noticia de su potencial restauración.
“Estoy muy orgullosa de haber sido parte de esto”, dijo entre lágrimas cuando la contactaron por teléfono. “Era un pub encantador, tengo muchos recuerdos maravillosos allí con mi esposo, que ahora ha fallecido”.
La orden, dijo, era un testimonio del poder de un pequeño grupo de personas comprometidas. “Estoy en esto a largo plazo, y no nos vamos a ir a ningún lado”, dijo sobre los lugareños que exigieron el regreso del pub.
La orden de ejecución que ordenó a los propietarios reconstruir el pub puede ser apelada dentro de 30 días, y si la orden no es apelada o la restauración no se completa dentro de tres años, los propietarios podrían ser procesados.
Los activistas podrían encontrar algo de esperanza en otras comunidades que han combatido batallas similares antes. El Carlton Tavern, un pub de la década de 1920 escondido entre edificios más nuevos en el barrio de Maida Vale en Londres, también fue destruido sin ceremonias en 2015, provocando una gran indignación local.
Después de una larga campaña pública, se ordenó a los desarrolladores que habían derribado el Carlton Tavern reconstruirlo ladrillo por ladrillo. Es posible que hayan tenido una tarea un poco más fácil, sin embargo.
En primer lugar, el edificio no estaba inclinado. En segundo lugar, la sociedad de preservación English Heritage había realizado una encuesta previa del Carlton Tavern mientras se consideraba para obtener un estatus histórico.
Durante ese proceso, la sociedad había creado un registro detallado de las habitaciones del pub y tomado moldes de sus características arquitectónicas distintivas. Cuando llegó el momento de reconstruir, había un plano claro.
Seis años después, mientras Gran Bretaña emergía de un bloqueo pandémico, el pub finalmente volvió a abrir sus puertas.