Tras su muerte, el Consejo de Prensa de la India pidió un informe “sobre los hechos del caso” al gobierno del estado.
El primer ministro del estado describió la muerte del Sr. Chandrakar como “desgarradora”.
En una publicación en X, dijo que se había formado un equipo especial de investigación para investigar el caso.
Se ha informado en los medios de comunicación indios que uno de los detenidos por la muerte del periodista es su primo.
Uno de los principales sospechosos, el propietario del compuesto Suresh Chandrakar, también familiar, está prófugo.
Los periodistas locales han realizado una protesta exigiendo una acción estricta contra los presuntos autores.
Los ataques a periodistas que informan sobre corrupción o degradación ambiental no son raros en India.
En mayo de 2022, Subhash Kumar Mahto, un periodista independiente conocido por su reportaje sobre personas involucradas en la minería ilegal de arena, recibió un disparo fatal en la cabeza por cuatro hombres no identificados fuera de su hogar en Bihar.
Reporteros Sin Fronteras ha dicho que un promedio de tres o cuatro periodistas son asesinados en relación con su trabajo en India cada año, convirtiéndolo en uno de los países más peligrosos del mundo para los medios de comunicación.<