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Existen mercados de vivienda inasequibles, y luego están los mercados “imposiblemente inasequibles”, cuatro de los cuales se encuentran en California, según un estudio reciente.
La crisis de la vivienda representa un obstáculo para la movilidad ascendente, y el Estado Dorado corre el riesgo de sufrir una estratificación especialmente aguda, según el informe anual de Demographia International Housing Affordability, producido por la Universidad Chapman en California y el Frontier Center for Public Policy en Canadá.
“Los altos precios de la vivienda, en relación con los ingresos, están teniendo un impacto marcadamente feudalizante en nuestro hogar en California, donde las principales víctimas son los jóvenes, minorías e inmigrantes”, escribió Joel Kotkin de Chapman. “Las políticas de vivienda restrictivas pueden presentarse como progresistas, pero en términos sociales su impacto podría ser mejor caracterizado como regresivo.”
El informe señala las “políticas de contención urbana” que buscan limitar la expansión urbana y aumentar la densidad. Esto ha resultado en precios más altos de la tierra, lo que se ha traducido en precios de vivienda dramáticamente más altos, explicó.
La tendencia hacia el aumento de la densidad tenía como objetivo reducir la dependencia de los automóviles y autopistas, mejorar el embotellamiento y hacer los vecindarios más transitables. Sin embargo, el informe señaló que, si bien esas políticas tenían buenas intenciones, resultaron en precios de la tierra que eran de ocho a 20 veces más altos dentro de los límites de contención urbana que fuera de ellos.
Al determinar la asequibilidad, el informe examinó 94 mercados en Australia, Canadá, China, Irlanda, Nueva Zelanda, Singapur, el Reino Unido y los EE. UU., comparando el precio medio de la vivienda en cada ubicación con el ingreso medio.
Se consideró asequible un índice de precio-ingresos de 3 o menos, con índices más altos correspondientes a niveles más graves de inasequibilidad. Un índice de 9 o más fue etiquetado como “imposiblemente inasequible”. De las 11 ciudades en esa categoría, cuatro de ellas se encuentran en California.
Hong Kong (16,7)
Sídney (13,8)
Vancouver (12,3)
San José (11,9)
Los Ángeles (10,9)
Honolulu (10,5)
Melbourne (9,8)
San Francisco (9,7)
Adelaida (9,7)
San Diego (9,5)
Toronto (9,3)
El informe también advirtió que la crisis de vivienda representa una amenaza existencial para la clase media, señalando que los altos costos de vivienda han reducido los estándares de vida y aumentado la pobreza.
“La clase media está bajo asedio principalmente debido a la escalada de los costos de la tierra”, dijo. “Como la tierra ha sido racionada en un esfuerzo por frenar la expansión urbana, el exceso de demanda sobre la oferta ha elevado los precios.”
El informe señaló que todas las ciudades “imposiblemente inasequibles” siguen políticas de planificación urbana que favorecen una mayor densidad, y recomendó que las ciudades abran la disponibilidad de tierra para reducir los costos de vivienda.
En el mercado de viviendas de EE. UU., el problema de la asequibilidad que empeora se ha ejemplificado con la desaparición de las viviendas iniciales de $200,000. Esto ha dejado a muchos millennials que intentan actualizar a casas más grandes para acomodar a sus crecientes familias en la estacada.
Pero los compradores potenciales se han rebelado contra los altos precios de las viviendas, lo que ha provocado que más propiedades permanezcan en el mercado sin venderse y que se reduzcan los precios de venta.
Esa dinámica se ha manifestado durante la temporada crítica de venta de primavera, que está llegando a su fin de manera deslucida debido a la débil demanda.
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