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Corea del Sur planea inspeccionar todos los aviones B737-800 de Boeing operados por aerolíneas nacionales después de que un avión de pasajeros se estrellara al aterrizar el domingo, matando a todos menos a dos de las 181 personas a bordo en uno de los peores desastres de aviación del país.
El presidente interino Choi Sang-mok ha ordenado controles de seguridad de emergencia en el sistema de operación de las aerolíneas del país, mientras los investigadores examinan por qué el Boeing 737-800 de dos motores operado por Jeju Air no desplegó su tren de aterrizaje, deslizándose por la pista antes de chocar con una pared y explotar en llamas en el aeropuerto internacional de Muan, en el sur del país.
El lunes por la mañana, otro avión B737-800 operado por la misma aerolínea regresó al aeropuerto doméstico de Gimpo debido a un mensaje de advertencia sobre su tren de aterrizaje, informó Jeju Air en una conferencia. Se descubrió que el tren de aterrizaje funcionaba bien, dijo la aerolínea. Las acciones de Jeju Air cayeron a su nivel más bajo el lunes, cayendo hasta un 16 por ciento.
“Estamos buscando primero llevar a cabo una inspección especial de seguridad de los aviones B737-800 Boeing en operación”, dijo un funcionario del ministerio de transporte en una conferencia televisada el lunes, señalando que más de 100 aviones B737-800 estaban en operación en Corea del Sur, en su mayoría por aerolíneas de bajo coste.
“Verificaremos sus ratios de operación y si las aerolíneas están cumpliendo con las normas de seguridad, incluyendo el mantenimiento regular antes y después de los vuelos.”
El 737-800 es un modelo de “nueva generación” de la línea de aviones de un solo pasillo de Boeing 737, que ha sido un caballo de batalla del transporte aéreo de corta distancia desde su introducción en la década de 1990. Se está reemplazando gradualmente por el más moderno y eficiente en combustible 737 Max.
Aunque la causa del accidente todavía se está investigando, el incidente es otro revés para el grupo de aviación estadounidense, que ha tenido un año difícil debido a sus problemas de fabricación y protocolos de seguridad, después de que un tapón de puerta se desprendiera de un 737 Max en vuelo en enero, tras los accidentes de 2018 y 2019.
El ministerio dijo que los registradores de datos de vuelo y de voz de la cabina del avión habían sido recuperados con cierto daño en el exterior y que se estaba comprobando si permanecían intactos para un análisis completo.
Pero también agregó que el piloto informó a control de tráfico aéreo que la aeronave había sufrido un impacto de ave y llamó mayday poco antes del aterrizaje de emergencia.
Corea del Sur está liderando la investigación sobre la causa del accidente, pero la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte de EE. UU. enviará un equipo de investigación al país para brindar asistencia, con la participación de Boeing y la Administración Federal de Aviación en la investigación.
Las víctimas eran principalmente surcoreanos que regresaban de vacaciones en Tailandia.
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