¿Cuál es tu papel actual y en qué consiste?
Jefe de cocina en Quite Simply French, que es un restaurante y hotel de cinco estrellas. Mi trabajo implica dirigir una brigada de cocineros, crear menús, establecer estándares para producir comida de estilo francés de alta calidad. Entrenar a cocineros más jóvenes para que sean lo mejor que puedan ser. Estamos abiertos los siete días de la semana para el desayuno, servicio de cena y almuerzo los domingos. Cambio el menú diariamente para utilizar productos que estén en su mejor momento. Lo que los franceses llaman menú ‘Du jour’.
¿Cuánto tiempo llevas como chef?
¡Quince años y contando!
¿Cómo empezaste a cocinar?
Siempre tuve pasión por la cocina desde una edad temprana. Recuerdo hacer un desastre en la cocina de casa. Mi mamá nunca estaba muy contenta. Siempre fui y sigo siendo un gran fanático de Raymond Blanc y Marco Pierre White. Miraba todos los programas de chefs como el Gran Menú Británico y MasterChef. Cuando salí de la escuela conseguí un trabajo como cocinero en un restaurante local mientras estudiaba en la universidad.
¿Dónde aprendiste tu oficio?
Estudié cocina profesional en Wigan & Leigh College durante tres años. Aprendí la forma clásica francesa de cocinar y me gradué completamente. Pasé del restaurante local en el que estaba trabajando y terminé trabajando para unos chefs realmente talentosos en un hotel en las afueras de Wigan llamado Ashfield House. Conseguí el puesto como demi chef de partie y ascendí a sous chef. El diferente estilo de comida y cómo los chefs interactuaban entre sí, fue todo un descubrimiento. Era como una esponja que absorbía todo lo que me enseñaban y me decían. Esto realmente me hizo avanzar en el mundo culinario de ser un chef.