Ciudades gigantes de China flexibilizan reglas de compra de vivienda para impulsar mercado inmobiliario.

El tambaleante mercado inmobiliario de China ha representado durante mucho tiempo alrededor de una cuarta parte de su economía y experimentó un crecimiento deslumbrante durante dos décadas (Hector RETAMAL)

Tres megaciudades chinas flexibilizaron el lunes las restricciones para comprar viviendas y el banco central de Pekín dijo que pediría a las instituciones financieras que redujeran las tasas de hipoteca, mientras el país busca salir de una crisis inmobiliaria.

Las medidas son las últimas de una serie de promesas de Pekín desde la semana pasada destinadas a impulsar la economía número dos del mundo.

El sector inmobiliario tambaleante ha representado durante mucho tiempo alrededor de una cuarta parte del producto interno bruto y experimentó un crecimiento deslumbrante durante dos décadas.

Pero una crisis inmobiliaria de varios años se ha convertido en un importante impedimento para el crecimiento, ya que el liderazgo del país tiene como objetivo alcanzar alrededor del cinco por ciento este año, un objetivo que los analistas consideran optimista dadas las numerosas dificultades que enfrenta la economía.

El domingo por la noche, tres de las ciudades más grandes del país dijeron que facilitarían la compra de viviendas en medidas que entrarían en vigor el 30 de septiembre.

La megaciudad sureña de Cantón, hogar de más de 14 millones de personas, dijo que los posibles compradores de viviendas ya no tendrían que tener su “calificación para la compra de viviendas” revisada, según la agencia de noticias estatal Xinhua.

Tampoco habrá “restricciones” sobre la cantidad de viviendas que una persona puede comprar, agregó.

La cercana ciudad de Shenzhen también flexibilizó algunas restricciones de compra, con los compradores ya no sujetos a “revisión de sus calificaciones para la compra de viviendas”, según medios locales citando a las autoridades.

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Y en el poder económico oriental de Shanghái, la ciudad más rica del país, las autoridades dijeron que reducirían la carga impositiva para algunos compradores de viviendas y reducirían los pagos iniciales de las viviendas.

El conjunto de anuncios se produce cuando el banco central de China dijo el domingo que pediría a las instituciones financieras que redujeran las tasas de interés de los préstamos hipotecarios existentes en un intento de “reducir las cargas financieras de los propietarios de viviendas”, según Xinhua.

Yan Yuejin, director adjunto del Instituto de Investigación y Desarrollo E-house China en Shanghái, dijo a AFP que los movimientos fueron impulsados por “presión” en el mercado inmobiliario.

“Hoy en día menos personas están comprando propiedades”, dijo.

Mover nuevamente el mercado inmobiliario, dijo Yan, era clave para impulsar el rezagado consumo interno, otro importante lastre para el crecimiento.

El liderazgo de China presentó la semana pasada una serie de medidas para impulsar la economía en una de sus mayores impulsos en años para reactivar el crecimiento.

– Desafío macro imponente –

Pero también advirtieron que la economía estaba plagada de “nuevos problemas”.

Los mercados han subido en Hong Kong y China continental ante las esperanzas de un mayor apoyo.

En el lunes, los promotores inmobiliarios fueron algunos de los grandes ganadores, con Kaisa subiendo casi un 60 por ciento, Sunac más de un 16 por ciento, y Fantasía sumando más del 30 por ciento.

Sin embargo, los analistas advirtieron que el estímulo “bazooka” probablemente aún no sería suficiente para impulsar el mercado inmobiliario y uno era escéptico de que las nuevas medidas del lunes ayudarían mucho.

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“Desde una perspectiva macro, estas políticas no son tan importantes, ya que estas ciudades representan una pequeña parte del mercado inmobiliario nacional”, dijo Zhiwei Zhang, presidente y economista jefe de Pinpoint Asset Management, en una nota.

“La política clave para abordar el desafío macro sigue siendo… fiscal,” dijo.

Destacando la difícil tarea para el gobierno, los datos oficiales mostraron el lunes que la manufactura se contrajo por quinto mes consecutivo en septiembre.

El Índice de Gerentes de Compras, un indicador clave de la producción industrial, se situó en 49.8 puntos, anunció la Oficina Nacional de Estadísticas.

De todas formas, representa una ligera mejora con respecto a los 49.1 puntos de agosto y por encima de los 49.5 pronosticados en una encuesta de Bloomberg.

Una cifra por encima de 50 indica una expansión de la actividad manufacturera, mientras que por debajo de eso es una contracción.

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