Las personas gritaban “Macron dimita”, “estás hablando tonterías” y “agua, agua, agua” mientras inspeccionaba las áreas dañadas. Durante su visita al centro hospitalario de Mamoudzou, la agencia de noticias AFP informó que una mujer le dijo a Macron: “Nadie se siente seguro aquí… la gente está peleando por agua”. “Tus servicios están desbordados”, le dijo un hombre en el hospital a Macron, según Reuters. “La ayuda no llega donde vivo”. Pero otros dijeron que estaban agradecidos por la visita de Macron y le instaron a quedarse más tiempo. El territorio, ubicado al norte de Madagascar, es la parte más pobre de Francia. Sufre de extensos problemas sociales y económicos, incluyendo altas tasas de inmigración ilegal desde las vecinas Comoras y viviendas de baja calidad y servicios públicos. Se cree que los migrantes han sido los más afectados por el ciclón. Se ha declarado un estado de catástrofe natural excepcional, lo que permite superar las barreras administrativas para hacer frente a la crisis de manera más rápida y efectiva. Se ha activado por un mes, pero puede ser extendido por períodos de dos meses si es necesario.