Durante la madrugada del Año Nuevo, Nueva Orleans estaba en pleno apogeo. Los festejantes salían de los bulliciosos bares y clubes abarrotados del Barrio Francés de la ciudad, un área a menudo llamada el corazón palpitante de la famosa vida nocturna de la ciudad. “Eran todos adolescentes jóvenes. Muchos de 19, 20, 21 años”, recordó Derrick Albert, un DJ local que ejerce su oficio todas las noches en la esquina de las calles Canal y Bourbon. Esa intersección alberga un hotel turístico repleto, una tienda que vende helados y dulces de chocolate y restaurantes que venden ostras y daiquiris en grandes vasos de plástico para llevar. Pero alrededor de las 03:15 (09:15 GMT), la alegría juvenil se convirtió en terror cuando un hombre, identificado como Shamsud-Din Jabbar, un veterano del ejército de EE. UU. y residente de Texas de 42 años, condujo un camión de alquiler a alta velocidad contra una multitud. Mató al menos a 15 personas y dejó heridas a docenas, algunas gravemente. Las imágenes de CCTV borrosas muestran el momento en que comenzó el ataque, con la camioneta blanca conduciendo por la calle Canal pasando otros vehículos, antes de girar a la derecha en la calle Bourbon, esquivando un coche de policía, acelerando repentinamente y arremetiendo contra la multitud. “Solo escuchamos este chirrido, la aceleración de un motor y un impacto enorme y fuerte”, dijo Kimberly Stricklen, una visitante de Nueva Orleans, a Reuters. “Luego, la gente gritando. El sonido de metal y cuerpos crujientes”. El vehículo continuaría durante tres cuadras, golpeando a más espectadores en el camino, hasta que el conductor chocó y se detuvo cerca de la esquina de las calles Bourbon y Conti. Jabbar luego abandonó su vehículo y disparó a la policía. Fue abatido por el fuego de retorno de ellos.
