Canadá pospone plan para ofrecer muerte asistida a personas con enfermedades mentales
Los ministros de salud, Mark Holland, y de justicia, Arif Virani, anunciaron el lunes que Canadá pospondrá un plan para ofrecer a personas que sufren de enfermedades mentales la opción de una muerte asistida médicamente.
Esa decisión sigue a la conclusión de un comité parlamentario especial que indagó el plan y llegó a la conclusión de que no hay suficientes médicos, especialmente psiquiatras, en el país para evaluar a pacientes con enfermedades mentales que desean poner fin a sus vidas ni para ayudarlos a hacerlo.
Dicho comité concluyó que el sistema necesita estar listo y es claro que no lo está. “Necesitamos más tiempo,” dijo el ministro de salud, Mark Holland.
Ni el ministro ofreció ninguna fecha para la extensión. La expansión previa estaba programada para entrar en vigencia el 17 de marzo.
Canadá ya ofrece muerte asistida médicamente a personas con enfermedades terminales y crónicas, pero el plan de extender el programa a personas con enfermedades mentales ha dividido a los canadienses.
Algunos críticos dicen que esta medida es una consecuencia de la incapacidad del sistema de salud pública de Canadá para ofrecer atención psiquiátrica adecuada, lo que está crónicamente subfinanciado y enfrenta una demanda que excede su disponibilidad.
Muchos psiquiatras dicen que el plan socavaría los esfuerzos para prevenir el suicidio, y han expresado el temor de que los pacientes con problemas complejos abandonen los tratamientos que pueden tardar años en dar resultados a favor de la muerte asistida.
Los partidarios dicen que negarles a las personas con enfermedades mentales la opción de terminar con su sufrimiento a través de la muerte es una forma de discriminación.
Canadá introdujo la muerte asistida después de que su Tribunal Supremo dictaminara en 2015 que obligar a las personas a sobrellevar un sufrimiento insoportable infringía los derechos fundamentales a la libertad y seguridad.
La ley se amplió en 2021 después de que el Tribunal Superior de Quebec anulara la ley original sobre la muerte asistida por motivos constitucionales porque solo se aplicaba a personas cuyas muertes eran “razonablemente previsibles”.
Los miembros del opositor Partido Conservador han acusado al gobierno liberal del primer ministro Justin Trudeau de promover una “cultura de muerte”. Algunos políticos de izquierda también se han opuesto a la extensión para las enfermedades mentales y han dicho que quieren centrarse en ampliar aún más la atención psiquiátrica.
Michael Cooper, miembro del Parlamento Conservador, que participó en el comité especial, dijo que el gobierno debería hacer la prórroga indefinida.
Dying with Dignity Canadá, un grupo que aboga por el derecho a la muerte asistida, dijo en un comunicado que estaba “decepcionado” por la última demora.
Los ministros de salud y justicia dijeron que la nueva fecha de implementación se incluiría en la legislación, que pronto se introducirá, que prorrogará formalmente la demora.
El año pasado, alrededor de 13,200 canadienses tuvieron una muerte asistida, lo que representa un aumento del 31 por ciento respecto al año anterior, según un informe del departamento de salud federal.
Tanto Canadá como Estados Unidos tienen una línea directa de suicidio y crisis de tres dígitos: 988. Si está pensando en suicidarse, llame o envíe un mensaje de texto al 988 y visite 988.ca (Canadá) o 988lifeline.org (Estados Unidos) para obtener una lista de recursos adicionales. Este servicio ofrece apoyo bilingüe en cada país, las 24 horas del día, los siete días de la semana.