Las autoridades camerunesas han prohibido a los medios de comunicación hablar sobre la salud del presidente Paul Biya, tras rumores de su muerte. El Ministro del Interior, Paul Atanga Nji, dijo a los gobernadores regionales que estas historias “perturban la tranquilidad de los cameruneses”. “Por lo tanto, está estrictamente prohibido cualquier debate en los medios sobre la condición del presidente”, insistió, amenazando que “los infractores enfrentarán la severidad de la ley”. El líder de 91 años – en el cargo por más de cuatro décadas – no ha sido visto en público desde el 8 de septiembre, cuando asistió a un foro China-África en Beijing. Varios funcionarios han rechazado la especulación en torno a la condición de Biya, insistiendo en que estaba en buena salud y de vacaciones privadas en Ginebra, Suiza. Nji dijo que el estado de salud del presidente era un asunto de seguridad nacional y instó a los gobernadores a crear unidades para garantizar que la orden fuera seguida por medios de comunicación privados y redes sociales. Muchos periodistas en el país han dicho que consideran la prohibición una violación de la libertad de prensa. “Al decir que no se debe hacer mención de la situación del presidente, considero que es una violación de nuestros derechos”, dijo un periodista camerunés a la BBC bajo condición de anonimato. Agregó que “realmente afectará la forma en que informamos porque ciertamente no querremos meternos en problemas con el gobierno”. Las restricciones a los medios también han generado preocupaciones sobre la seguridad de los periodistas en un país donde los profesionales de los medios son regularmente blanco de funcionarios y grupos insurgentes. En el pasado, los separatistas anglófonos han secuestrado a periodistas mientras que el gobierno ha arrestado y detenido a miembros de los medios. “Seguiré informando aunque tema que puedan rastrearme, porque de todos modos mi informe hablará sobre el paradero del presidente o lo que le podría estar sucediendo. Seguiré haciendo mi trabajo”, dijo otro periodista. En un comunicado el jueves, la organización global de libertad de prensa Comité para la Protección de Periodistas (CPJ) instó al gobierno camerunés a “poner fin a sus amenazas de sancionar a periodistas de medios privados que informan sobre la condición y el paradero del presidente Paul Biya”. “La salud del presidente, que ha estado en el poder durante 41 años y que podría presentarse a la reelección el próximo año, es de interés público. Cualquier intento equivocado de censurar la información sobre su salud por razones de seguridad nacional solo alimenta la especulación desenfrenada”, dijo Angela Quintal, jefa del Programa de África del CPJ. “El gobierno camerunés debería simplemente acabar con los rumores organizando una aparición pública del jefe de estado”, sugirió. Mientras la especulación sobre el bienestar del presidente Biya continúa, los cameruneses están esperando con gran expectativa su regreso al país en los próximos días, como prometieron las autoridades.