RIO DE JANEIRO (AP) — La Cámara baja de Brasil aprobó una importante reforma del notoriamente complicado sistema tributario de la nación en una gran victoria para el presidente de izquierda Luiz Inácio Lula da Silva, quien respaldó la propuesta.
La esperada reforma tributaria tiene como objetivo simplificar el sistema, considerado ampliamente demasiado gravoso tanto para individuos como para empresas, y estimular el crecimiento económico que ha oscilado entre recesiones y estancamiento durante la última década.
La reforma “facilitará la inversión”, tuiteó Lula, quien celebró la aprobación de la propuesta el viernes por la noche y agradeció al Congreso.
La reforma, aprobada inicialmente por los diputados en julio, tuvo que ser votada nuevamente después de que el Senado hiciera cambios en el texto antes de devolverlo a la Cámara baja.
La enmienda constitucional pasó fácilmente con márgenes de más de 3 a 1 en ambas rondas de votación. Cuando los resultados aparecieron en la pantalla de televisión gigante en el Congreso, los legisladores reaccionaron con gritos y aplausos.
“Después de más de 40 años, el país tendrá un sistema tributario moderno, ágil y eficiente que cambiará la economía del país”, tuiteó el presidente de la Cámara, Arthur Lira, quien agregó que no es “el sistema perfecto, pero uno que puede ser aprobado”.
Las relaciones entre Lula y el Congreso, dominado por legisladores conservadores, han estado tensas. Esta semana, el Congreso anuló un veto de Lula para poder restablecer la legislación que deshace las protecciones de los derechos territoriales de los pueblos indígenas.
Y la aprobación de la reforma tributaria siguió a asignaciones récord de fondos a los legisladores para proyectos en sus estados de origen, revelando la dependencia del gobierno de subvenciones para obtener votos a favor de su agenda económica.
Pero la adopción de la reforma tributaria sigue siendo una victoria para Lula, cuya administración hizo de la aprobación una prioridad.
Esta victoria sigue a otro logro reciente del presidente, quien nominó al Ministro de Justicia Flávio Dino para la Corte Suprema. El Senado aprobó esa elección el miércoles, a pesar de la oposición de legisladores cercanos al ex líder de extrema derecha Jair Bolsonaro.
La reforma tributaria fusionará los cinco impuestos principales en dos impuestos al valor agregado: uno federal y otro para ser compartido entre estados y municipios.
En el sistema actual, los cinco impuestos principales sobre el consumo se recaudan en diferentes niveles de gobierno, con las 27 entidades federales y más de 5.500 municipios imponiendo sus propias cargas, frecuentemente actualizadas.
El sistema genera diferencias de interpretación, lo que lleva a demandas que consumen mucho tiempo y requieren que las empresas cuenten con departamentos de contabilidad. Esto reduce los presupuestos para áreas como la investigación y el desarrollo, y disuade la inversión extranjera.
Ahora, se espera que la reforma sea promulgada en una sesión conjunta del Congreso que tendrá lugar la próxima semana.