El Secretario de Estado Antony J. Blinken presionó a su homólogo chino el sábado sobre áreas de desacuerdo entre las dos naciones, incluido el apoyo de China al sector industrial militar de Rusia, informó el Departamento de Estado en un comunicado. Blinken se reunió con el funcionario chino, Wang Yi, en los márgenes de una conferencia internacional anual de naciones del sudeste asiático en la capital laosiana de Vientiane. También asistió Sergey V. Lavrov, el ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, quien en una sesión de grupo culpó a Estados Unidos por provocar la invasión a gran escala de Ucrania por parte de Rusia en 2022, según un funcionario anónimo del Departamento de Estado.
Durante la reunión, Wang escuchó las críticas de Blinken, pero señaló que China no ha enviado armas a Rusia, dijo el funcionario del Departamento de Estado, que habló bajo condición de anonimato para describir con franqueza las conversaciones diplomáticas.
Blinken también mencionó la guerra en Gaza y planteó cuestiones separadas relacionadas con Corea del Norte y Myanmar. Destacó temas de derechos humanos en Tíbet y Hong Kong, así como acciones militares chinas en torno a Taiwán.
El Departamento de Estado dijo en un resumen vago de la reunión que Blinken enfatizó la “visión compartida del gobierno estadounidense de un Indo-Pacífico que sea libre, abierto, conectado, próspero, seguro y resistente”.
Ese es un lenguaje codificado que los funcionarios estadounidenses utilizan para mostrar desaprobación de las políticas de China en la región, incluidas sus ambiciosas reclamaciones territoriales en los mares del Sur y del Este de China y las agresiones marítimas por parte de guardacostas y otros buques.