MELBOURNE, Australia (AP) — El gobierno australiano anunció el martes que propondrá leyes para prohibir el doxxing, es decir, la publicación maliciosa en línea de información personal o identificativa sin el permiso de la persona afectada, luego de que activistas pro palestinos publicaran detalles personales de cientos de personas judías en Australia.
El fiscal general Mark Dreyfus dijo que las leyes propuestas, que aún no han sido redactadas, implicarían emitir avisos de eliminación a las plataformas de redes sociales y aplicar multas por las tácticas de intimidación.
El gobierno respondió a informes de noticias de Nine Entertainment la semana pasada en los que se informaba que activistas pro palestinos habían publicado los nombres, imágenes, profesiones y cuentas de redes sociales de personas judías que trabajaban en la academia y en la industria creativa.
Activistas pro palestinos distribuyeron una transcripción de casi 900 páginas que se filtró de un chat privado de WhatsApp formado el año pasado por escritores, artistas, músicos y académicos judíos, reportaron los diarios de Nine la semana pasada. La transcripción iba acompañada de una hoja de cálculo que contenía los nombres y otros detalles personales de casi 600 personas, supuestamente los miembros del grupo.
La autora Clementine Ford, quien fue una de varias activistas que publicaron enlaces a la información filtrada, dijo que no debería considerarse doxxing.
“Este chat demostró movimientos extremadamente organizados para castigar a activistas palestinos y sus aliados”, publicó Ford en Instagram.
Dreyfus dijo que las nuevas leyes fortalecerían las protecciones australianas contra el discurso de odio, pero no proporcionó muchos detalles sobre cómo funcionarían.
“El aumento en el uso de plataformas en línea para dañar a las personas a través de prácticas como el doxxing, la publicación maliciosa de su información personal sin su permiso, es un desarrollo profundamente perturbador”, dijo Dreyfus, quien es judío, a los reporteros.
“El reciente ataque a miembros de la comunidad judía australiana a través de prácticas como el doxxing fue impactante, pero lamentablemente, lejos de ser un incidente aislado”, agregó Dreyfus.
Ha habido un aumento en los informes de antisemitismo en Australia desde que comenzó la guerra de Israel contra Hamas en octubre.
La agencia de seguridad en línea del gobierno australiano define el doxxing, también conocido como “dropping dox” o documents, como la “exposición intencional en línea de la identidad de un individuo, información privada o detalles personales sin su consentimiento”.
Sobre su definición, Dreyfus dijo que el doxxing era la “publicación maliciosa, de forma pública, de información personal de las personas sin su consentimiento”.
“Vivimos en una vibrante comunidad multicultural que debemos esforzarnos por proteger”, dijo Dreyfus.
El plan del gobierno de prohibir el doxxing fue bien recibido por el Consejo Ejecutivo de Judíos Australianos, que representa a la comunidad judía de Australia.
“Esperamos con interés trabajar con el gobierno para garantizar que se comprenda toda la magnitud del daño causado y que las nuevas leyes protejan efectivamente a los australianos de esta práctica vergonzosa y peligrosa”, dijo el presidente del consejo, Daniel Aghion.
Nigel Phair, experto en ciberseguridad de la Universidad Monash, aplaudió la idea de una ley contra el doxxing, pero cuestionó cómo se podría hacer cumplir.
“Es realmente difícil para las agencias policiales hacer cumplir esas leyes cuando, en realidad, no tienen acceso a los datos. Realmente, son las empresas de medios sociales las que tienen la responsabilidad”, dijo Phair a la Australian Broadcasting Corp.
“Nuestras agencias policiales, me atrevo a decir, ya están abrumadas con las investigaciones en línea con la cantidad de crimen que tenemos en línea. Añadir esto a eso, sin recursos adicionales y sin el trabajo realmente integrado con las plataformas de medios sociales, no hará mucho”, añadió Phair.