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Olvida el auto-servicio de comida rápida. Walmart quiere que los comensales encuentren una comida económica en los pasillos de abarrotes.
A medida que la comida rápida se vuelve más costosa, el mayor supermercado del país ve una oportunidad de ventas.
En una llamada con CNBC el jueves, el director financiero de Walmart, John David Rainey, dijo que parte del crecimiento de las ventas del minorista en el último trimestre provino de clientes que recurrieron a los pasillos de abarrotes en busca de comidas más baratas que las que pueden obtener en restaurantes de servicio rápido.
“Es aproximadamente 4.3 veces más caro comer fuera que comer en casa”, dijo. “Y eso está beneficiando nuestro negocio”.
A medida que los clientes ven que algunos productos de abarrotes mantienen el mismo precio o incluso se vuelven más baratos, la brecha entre comprar alimentos del menú y cocinar en casa se ha ampliado aún más, dijo.
Las acciones de Walmart se dispararon a un máximo histórico el jueves, después de superar las expectativas de ventas y ingresos trimestrales de Wall Street y dijo que espera que sus resultados anuales estén en el extremo alto del, o mejor que, su pronóstico anterior. Las transacciones en los EE. UU. aumentaron un 3.8%, ya que más clientes visitaron sus tiendas y su sitio web.
El fuerte tráfico de tiendas de Walmart y los resultados trimestrales están en desacuerdo con los de las empresas de restaurantes, incluyendo McDonald’s, Starbucks y Yum Brands. El tráfico de visitantes a las cadenas de servicio limitado, que incluye restaurantes de comida rápida y de servicio rápido, cayó un 3.5% en el primer trimestre, según Revenue Management Solutions. Los ejecutivos de restaurantes culparon al mal tiempo en enero y febrero, y a una desaceleración del consumidor, especialmente entre los comensales de menores ingresos.
Al igual que muchos restaurantes, McDonald’s ha enfrentado críticas a sus precios. Un combo de Big Mac de $18 vendido en uno de sus restaurantes franquiciados en Connecticut se volvió viral en las redes sociales, lo que llevó a los ejecutivos a defender la fijación de precios de la cadena en su conferencia telefónica. El gigante de las hamburguesas informó un decepcionante crecimiento de las ventas en tiendas comparables en EE. UU. del 2.5%, lo que sugiere que su tráfico de visitantes cayó durante el trimestre.
Sin embargo, el CEO de McDonald’s, Chris Kempczinski, dijo que los consumidores, especialmente aquellos que ganan menos ingresos, están buscando ofertas. La cadena ofrecerá un menú de valor de $5 a partir del 25 de junio durante aproximadamente un mes.
No todos los restaurantes han tenido problemas para hacer que los comensales paguen precios más altos: cadenas de comida rápida como Chipotle, Wingstop y Sweetgreen reportaron ventas sólidas en sus últimos trimestres.
Los datos de inflación del Departamento de Trabajo de los EE. UU. reflejan la diferencia entre el precio que los clientes pagan por alimentos que cocinan en casa o empacan para el almuerzo, en comparación con lo que pagan en una cafetería o restaurante. Hasta abril, el precio de los alimentos en casa, una categoría que mide el costo total de los alimentos comprados en tiendas de abarrotes u otras tiendas de alimentos, aumentó un 1.1% interanual. El precio de los alimentos fuera de casa subió significativamente más: un 4.1% interanual.
En la llamada de ganancias de la compañía el jueves, el CEO de Walmart U.S., John Furner, señaló una nueva herramienta en el arsenal de Walmart que puede utilizar para competir más agresivamente con los restaurantes: su nueva marca de abarrotes, Bettergoods.
La línea premium incluye sabores y mercancía únicos diseñados para clientes más conscientes de la salud o con una dieta especial, como artículos sin gluten o a base de plantas. Por ejemplo, incluye yogur griego sabor fresas con crema, empanadas de pollo al curry, alitas de pollo estilo restaurante y helado de leche de avena con caramelo salado.
El 70% de los artículos de la marca cuestan menos de $5, dijo Furner, un punto de precio que puede llamar la atención de compradores que “intentan alimentar a una familia de cuatro, cinco, [o] seis”.
— CNBC’s Amelia Lucas contribuyó a este informe.