El proyecto del Apple Car fue cancelado antes de ver la luz del día, y aunque Apple nunca ha reconocido públicamente el proyecto, conocemos muchos detalles al respecto gracias a diferentes personas cercanas a la empresa. Ahora, un nuevo informe ha revelado detalles sobre una asociación entre Apple y BYD para trabajar en baterías para el llamado Apple Car.
Según un informe de Bloomberg publicado el miércoles, Apple ha trabajado estrechamente con el fabricante de automóviles chino BYD. Ambas compañías llegaron a un acuerdo alrededor de 2017 para construir baterías utilizando celdas de fosfato de hierro y litio (LFP). Esta tecnología aumentaría significativamente la autonomía del automóvil y también se consideraba más segura que las baterías típicas de vehículos eléctricos.
Aunque BYD tiene sus propios vehículos eléctricos, la batería construida en asociación con Apple estaría diseñada exclusivamente para el Apple Car. Apple eligió ingenieros especializados en paquetes de baterías avanzadas y gestión del calor para trabajar en el proyecto, mientras que BYD aportó conocimientos en fabricación y avances utilizando baterías LFP.
Cuando Apple buscaba socios para trabajar en el proyecto del automóvil, se dice que BYD se acercó a la empresa para mostrar una versión temprana de su batería “Blade”. Se informa que los ejecutivos de Apple quedaron maravillados por la seguridad y capacidad de la batería y acabaron eligiendo trabajar con la empresa china. La batería Blade es ahora uno de los puntos de venta de los automóviles BYD.
A pesar de haber trabajado con BYD durante años, Apple supuestamente se retractó de la asociación y consideró sistemas de otras empresas.
Con el proyecto del Apple Car ahora cancelado, muchas personas involucradas en el proyecto han revelado detalles al respecto. La idea de construir un automóvil supuestamente surgió en Apple en 2014, y la empresa tuvo conversaciones con muchos fabricantes de automóviles como Mercedez-Benz, Volkswagen e incluso Tesla para buscar su ayuda.
El proyecto ha tenido muchas variaciones desde su primer concepto. Debido a los desafíos de construir un automóvil completamente autónomo como querían los ejecutivos de Apple, la empresa reconsideró más tarde el proyecto con un enfoque menos ambicioso. Aún así, la construcción de un automóvil parecía demasiado complicada para Apple, y la compañía puso fin al proyecto Titan.
Se estima que el proyecto del automóvil le costó a Apple más de $1 mil millones al año, mientras que la empresa planeaba vender su automóvil por alrededor de $120,000.