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Los aliados demócratas de Joe Biden se unieron en torno a él el viernes después de verse tambaleados por un informe de un fiscal especial que retrataba al presidente de EE. UU. como un “hombre mayor bien intencionado con mala memoria”.
Los legisladores presentaron al presidente de 81 años como el mejor candidato para liderar a los demócratas en las elecciones de noviembre, a pesar de las dudas latentes en algunas áreas del partido sobre su lucidez mental y si debería retirarse.
“Estoy absolutamente confiado basándome en [el] increíble historial de éxito para el país, que él es la persona adecuada para liderar el país durante otros cuatro años,” dijo a periodistas Chris Van Hollen, senador demócrata por Maryland.
“[Donald] Trump tiene 78 años. Y el presidente tiene 81 años. ¿Es eso significativo? Por supuesto que no, es lo mismo. Son personas mayores, y son nuestras elecciones,” dijo el senador de Pensilvania John Fetterman.
“Esencialmente es una elección fundamental que tenemos como nación,” agregó Fetterman. “¿Queremos orden sobre caos? ¿Queremos la verdad sobre mentiras? ¿Queremos virtud sobre la corrupción y la chabacanería?”
Hablando en la Casa Blanca el viernes, la vicepresidenta Kamala Harris, ex fiscal, calificó los comentarios del fiscal especial sobre la memoria de Biden como “gratuitos, inexactos e inapropiados”.
Karine Jean-Pierre, secretaria de prensa de la Casa Blanca, dijo que la descripción de la memoria de Biden en el informe “no se ajusta a la realidad”.
Pero otros demócratas advirtieron sobre el impacto político duradero del informe de Robert Hur, un ex fiscal federal y republicano registrado que supervisó una investigación sobre la gestión de materiales clasificados por parte de Biden en sus residencias y oficinas privadas.
Dan Pfeiffer, ex asesor senior de Obama, dijo temer que las descripciones de la memoria de Biden por parte del fiscal especial “lleguen al público en general”.
El informe de Hur dijo que en las entrevistas con su oficina, Biden había olvidado fechas significativas, incluyendo cuándo fue vicepresidente de Barack Obama y cuándo su hijo mayor Beau murió de cáncer.
El fiscal especial optó por no presentar cargos, argumentando que en cualquier juicio, Biden “probablemente se presentaría ante un jurado, como hizo durante nuestra entrevista con él, como un hombre mayor simpático, bien intencionado, con mala memoria”.
La campaña de Trump aprovechó de inmediato el informe. “Es un umbral muy bajo ser declarado mentalmente apto para el juicio,” dijo Stephen Miller, ex asesor del gobierno de Trump, a Fox News.
“Ese umbral es muy bajo. . . el presidente de EE. UU. no cumple con eso.”
Pfeiffer escribió en un boletín informativo el viernes que Biden ahora tenía que “demostrar repetidamente que Hur está equivocado y que él está a la altura del trabajo. . . lo que significa hacer más entrevistas y más ruedas de prensa.”
Biden ha evitado tales eventos durante su presidencia. Declinó una invitación a una entrevista en CBS News este fin de semana para un segmento que habría salido al lado del Super Bowl, un evento en horario de máxima audiencia que probablemente llegaría a más de 100 millones de estadounidenses.
“Privadamente, muchos demócratas seguirán preocupados de que [la edad de Biden] se convierta en un problema cada vez más difícil a medida que avanza la campaña,” dijo Kevin Madden, asesor del ex candidato presidencial republicano Mitt Romney y ahora en la consultora Penta Group.
Madden agregó que “el desafío para la campaña de Biden y la Casa Blanca es que cada vez que intentan abordar [el tema de la edad], lo refuerzan.”
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Una encuesta de NBC News publicada esta semana, pero realizada antes de que se publicara el informe Hur, encontró que tres cuartos de los votantes estadounidenses, incluida la mitad de los demócratas, tienen preocupaciones sobre la salud mental y física de Biden.
“Mi memoria está bien,” declaró Biden en una conferencia de prensa improvisada el jueves por la noche que se volvió cada vez más hostil a medida que los reporteros gritaban preguntas sobre su edad y su lucidez mental.
Pero, minutos después, se refirió al presidente de Egipto, Abdel Fattah al-Sisi, como el líder de México en respuesta a una pregunta de un reportero sobre la guerra entre Israel y Hamas en Gaza. Fue el último de una serie de pasos en falso públicos en los que el presidente de EE. UU. ha confundido líderes extranjeros.
Hablando el fin de semana pasado en un evento en Nevada, Biden confundió a François Mitterrand, el presidente de Francia fallecido en 1996, con el actual presidente Emmanuel Macron.
En dos recaudaciones de fondos separadas en Nueva York el miércoles, Biden se refirió al difunto canciller alemán Helmut Kohl cuando mencionó a la ex canciller alemana Angela Merkel.