El alcalde de la ciudad de Nueva York, Eric Adams, ha sido acusado por fiscales federales tras una investigación de corrupción de varios meses que ha envuelto al Ayuntamiento y ha provocado una serie de renuncias y jubilaciones de altos miembros de la administración del partido Demócrata.
Los cargos contra Adams, de 64 años, se darán a conocer por la oficina del fiscal del Distrito Sur de Nueva York el jueves, según múltiples informes de medios de comunicación de EE. UU. Esto lo convertiría en el primer alcalde de Nueva York moderno en ser acusado estando en el cargo.
En un comunicado, Adams dijo: “Siempre supe que si defendía a los neoyorquinos, sería un objetivo, y me convertí en un objetivo”.
El ex oficial de policía, que fue elegido en 2021 prometiendo ser duro con el crimen, agregó: “Si soy acusado, soy inocente, y lucharé con todas mis fuerzas y espíritu”.
En un breve video publicado poco después, Adams dijo que esperaba ser acusado y que las acusaciones eran “completamente falsas, basadas en mentiras”. Acusó a los investigadores de intentar socavar su credibilidad.
Adams, un demócrata centrista y ex presidente del condado de Brooklyn, había hecho campaña con una plataforma de ley y orden y se comprometió a acabar con la falta de vivienda en Nueva York.
Su tiempo en el cargo ha sido empañado por acusaciones de amiguismo, así como crecientes críticas por la gestión caótica de su administración de los migrantes llevados en autobús desde la frontera sur.
Adams también ha estado enfrentando una investigación de corrupción relacionada con su campaña electoral de 2021.
El año pasado, agentes allanaron la casa en Brooklyn de su recaudadora de fondos principal de campaña de 25 años, Brianna Suggs, supuestamente como parte de una investigación sobre donaciones del estado turco. Adams fue detenido en la calle poco después por el FBI, que confiscó su teléfono y computadora portátil.
Una serie de otros allanamientos, algunos aparentemente no relacionados con la investigación de la campaña, siguieron. Se dirigieron al primer vicealcalde y al vicealcalde de seguridad pública, entre otros.
Este mes, el comisionado de policía de Nueva York, Edward Caban, cuyo teléfono fue supuestamente confiscado por la policía, renunció, diciendo que “el ruido en torno a los acontecimientos recientes” había hecho imposible su trabajo. La casa del reemplazo interino de Caban también fue registrada por investigadores.
Mientras tanto, el Ayuntamiento fue sacudido por la renuncia de uno de sus abogados senior y el inesperado retiro de David Banks, quien está a cargo del sistema escolar público de Nueva York y cuyos teléfonos también fueron confiscados en la investigación.
Adams ha afirmado consistentemente que no tiene “nada que ocultar” y dijo que estaba cooperando con las investigaciones, mientras que prominentes demócratas han pedido su renuncia.
La congresista de Nueva York, Alexandria Ocasio-Cortez, se sumó a esos llamados el miércoles, diciendo que no podía ver cómo el alcalde Adams podía seguir gobernando la ciudad de Nueva York. Brad Lander, el contralor de la ciudad que también se postula para alcalde, dijo que Adams debería renunciar.
El miércoles por la noche, se vio a Adams en una recepción a la que asistió el presidente Joe Biden en el Museo Metropolitano de Arte.
Un portavoz de la oficina del fiscal de EE. UU. para el Distrito Sur de Nueva York no respondió a una solicitud de comentario.