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(Reuters) – Alberto, la primera tormenta con nombre de la temporada de huracanes del Atlántico de 2024, se ha debilitado a depresión tropical mientras avanza tierra adentro sobre el noreste de México, provocando más lluvias intensas e inundaciones después de dejar cuatro muertos, incluidos tres niños.
El gobernador del estado mexicano de Nuevo León informó a los medios locales el miércoles por la noche que al menos tres personas menores de 18 años habían fallecido a causa de la tormenta. Para la mañana del jueves, protección civil informó de una cuarta muerte debido a una descarga eléctrica, según medios locales.
Una de las víctimas fue identificada posteriormente por los servicios de emergencia como un adolescente de 15 años arrastrado por una corriente fuera de Monterrey, la tercera ciudad más grande de México en el estado de Nuevo León, donde el río Santa Catarina creció e inundó sus riberas.
Sin embargo, la tormenta trajo lluvias muy necesarias a través de partes de México, donde algunos de sus embalses tenían niveles de agua tan bajos como el 8% debido a una sequía prolongada y una ola de calor en verano, incluso llenando la muy mermada presa La Boca hasta el borde.
Brett Anderson, meteorólogo senior de AccuWeather, dijo que el calor extremo y la sequía que experimentó México se volverán más normales debido al cambio climático, citando temperaturas por encima del promedio histórico en 5.2°C (9.4°F) en la capital, que recibió apenas más de un tercio de las lluvias normales para este período.
Se espera que el cambio climático también contribuya a más tormentas en el Atlántico durante esta temporada de huracanes, ya que las aguas oceánicas más cálidas permiten que las tormentas poderosas se intensifiquen más rápidamente.
El Centro Nacional de Huracanes de EE. UU. (NHC) dijo que Alberto seguirá provocando fuertes lluvias e inundaciones en partes del noreste de México y que gran parte de la costa de Texas podría seguir experimentando inundaciones moderadas.
La tormenta tocó tierra en horas de la mañana del jueves cerca de la ciudad mexicana de Tampico y se desplaza hacia el oeste a través del país a 18 millas por hora (30 km/h), con vientos máximos sostenidos de 35 mph (55 km/h), informó el NHC.
Los pronosticadores habían advertido que Alberto, que trajo lluvias y oleajes a través del Golfo de México, también estaba interactuando con formaciones en el Pacífico, lanzando conjuntamente más aguaceros sobre América Central, causando inundaciones y deslizamientos de tierra.
Se han reportado al menos 22 muertes en América Central desde las fuertes lluvias del fin de semana pasado. Estas incluyen 13 en El Salvador, ocho en Guatemala y una en Honduras, donde las autoridades dijeron que más de 900 personas fueron evacuadas de sus hogares.
Las autoridades guatemaltecas informaron el jueves que 370 personas permanecían en refugios temporales y cerca de 300 casas habían sufrido daños graves.
“La crisis climática está provocando que eventos climáticos extremos como huracanes y tormentas tropicales sean más frecuentes y severos”, dijo la asesora regional de Save the Children, Moa Cortobius.
Alrededor de 35 millones de niños viven en áreas expuestas y están en riesgo en esta temporada en el Atlántico, agregó.”