Al menos 28 de los casi 300 niños secuestrados por hombres armados han logrado escapar, según el gobernador del estado de Kaduna en Nigeria, quien se lo comunicó a la BBC News.
El ejército de Nigeria lidera una desesperada búsqueda de los niños capturados en la ciudad del norte de Kuriga el jueves.
Las tropas trabajan junto a la policía y equipos de búsqueda locales para rastrear los bosques dentro de Kaduna y los estados vecinos.
Este rapto es la mayor abducción masiva de una escuela desde 2021.
Bandas de hombres armados en motocicletas se llevaron a casi 300 niños de primaria y secundaria de entre ocho y 15 años, según autoridades escolares y padres.
Se estima que prácticamente todas las familias en la ciudad tienen a un niño entre los secuestrados.
Uno de los alumnos, de 14 años, que recibió un disparo de los secuestradores y estaba siendo tratado en un hospital, ha fallecido desde entonces.
Los secuestros ocurrieron después de que mujeres y niños fueran llevados de una ciudad remota en el estado de Borno el día anterior.
El gobernador del estado de Kaduna, Uba Sani, le dijo a la BBC que la falta de presencia en el terreno es la principal razón del aumento de secuestros en la zona.
Los padres y familiares de los niños secuestrados han formado grupos de vigilancia y están buscando ayuda de comunidades vecinas sobre el paradero de los niños.
El vicepresidente de Nigeria, Kashim Shettima, está visitando Kaduna y tiene previsto reunirse con el gobernador.
El presidente Bola Tinubu dijo en redes sociales que confía en que las víctimas serán rescatadas.
Tuiteó: “Nada más es aceptable para mí y para los familiares esperando noticias de estos ciudadanos secuestrados. La justicia será aplicada de manera decisiva.”
También se están realizando búsquedas en los estados de Katsina y Zamfara.
El masivo secuestro en Kaduna evoca recuerdos de las casi 300 chicas en la ciudad nororiental de Chibok en 2014.
En algunas partes del norte de Nigeria, los padres están dejando de enviar a sus hijos a la escuela por miedo a su seguridad.
Los secuestros por rescate a manos de hombres armados se han vuelto endémicos en el norte de Nigeria, impidiendo que miles de niños asistan a la escuela.
El último gran secuestro que involucró a niños en Kaduna fue en julio de 2021 cuando hombres armados se llevaron a más de 150 estudiantes.
Los estudiantes fueron reunidos meses después de que sus familias pagaran rescates.
En 2022, Nigeria aprobó una ley que prohíbe los pagos de rescate a los secuestradores y establece una pena de cárcel de 15 años por realizarlos.
También estableció que el secuestro es castigado con la pena de muerte en casos donde las víctimas fallezcan.
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