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Los costos de endeudamiento del gobierno del Reino Unido aumentaron ligeramente el viernes pero se mantuvieron por debajo del pico del jueves, mientras los inversores esperan un informe clave sobre el empleo en Estados Unidos más tarde en el día.
El rendimiento de los bonos del Tesoro a 10 años subió 0.03 puntos porcentuales hasta el 4.84 por ciento, pero seguía por debajo del nivel del 4.93 por ciento alcanzado el jueves, que fue el más alto desde 2008. Los rendimientos se mueven inversamente a los precios.
La libra esterlina bajó ligeramente frente al dólar, cayendo un 0.2 por ciento hasta $1.229.
Los bonos del Tesoro han sufrido en sesiones recientes debido a un aumento global en los rendimientos de los bonos del gobierno impulsado por la persistente inflación en algunas economías importantes.
Los analistas dijeron que los datos de empleo de EE. UU. para diciembre, que se publicarán más tarde el viernes, ayudarán a determinar la dirección de los rendimientos de los bonos, incluidos los bonos del Tesoro.
El Reino Unido ha sido particularmente afectado por la venta masiva global ya que los inversores se preocupan por las elevadas necesidades de endeudamiento del gobierno y la creciente amenaza de estanflación, que combina un crecimiento anémico con presiones de precios persistentes.
La credibilidad de los planes económicos del gobierno es vulnerable a tensiones en el mercado de bonos después de que la canciller Rachel Reeves se dejara solo £9.9 mil millones de margen contra sus reglas fiscales revisadas en el presupuesto de otoño del año pasado.
Los aumentos en los rendimientos de los bonos desde entonces han puesto en peligro ese margen presupuestario. El nivel de rendimiento de los bonos es un determinante importante del margen presupuestario, dadas sus implicaciones para la factura de intereses del gobierno, que supera los £100 mil millones al año.
Esta semana, el Partido Laborista ha tratado de tranquilizar a los inversores, con Darren Jones, el número dos en el Tesoro del Reino Unido, diciendo a los diputados el jueves que el gobierno estaba comprometido con la “estabilidad económica y unas finanzas públicas sólidas”.
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