El Primer Ministro de Eslovaquia, Robert Fico, sorprendió con una visita a Moscú para reunirse con Vladimir Putin, convirtiéndose en el tercer líder occidental en encontrarse con el mandatario ruso desde la invasión total de Ucrania hace tres años. Fico, crítico vocal del apoyo de la Unión Europea a Kiev en la guerra, dijo que discutieron sobre el suministro de gas ruso a Eslovaquia, país en el que se apoyan en este aspecto. Un trato con el gigante del gas ruso, Gazprom, para transitar energía a través de Ucrania a Eslovaquia, está próximo a expirar a finales de este año. “Los altos funcionarios de la UE fueron informados sobre mi viaje y su propósito… el viernes”, escribió Fico en Facebook. También dijo que la reunión en Moscú fue una reacción a la postura del presidente ucraniano Volodymyr Zelensky de oponerse a que el gas ruso sea transportado a través de su territorio. El Primer Ministro eslovaco, quien sobrevivió a un intento de asesinato a principios de este año, dijo que tuvo una “larga conversación” con Putin y que ambos intercambiaron opiniones sobre la situación militar en Ucrania. Ambos hablaron sobre “las posibilidades de poner fin temprano y pacíficamente a la guerra” y las relaciones mutuas entre Rusia y Eslovaquia, según escribió Fico en Facebook. Eslovaquia y Hungría, países que dependen del gas ruso, han expresado preocupaciones sobre la interrupción de suministros. En octubre de 2023, cuando Fico volvió a ser primer ministro, puso fin a la ayuda militar de Eslovaquia a Ucrania. Pero insiste en querer ser un “buen vecino amigable” para Ucrania. La reunión de Fico con Putin se da en medio de una cumbre de seguridad donde los líderes de Italia, Suecia, Grecia y Finlandia se reúnen. Posteriormente, el Primer Ministro de Finlandia, Petteri Orpo, dijo que Rusia era una “amenaza permanente y peligrosa” para la UE. También hizo hincapié en la necesidad de aumentar el gasto en defensa y apoyar a Ucrania.