El líder supremo de Irán, el Ayatolá Ali Khamenei, espera una lucha de resistencia renovada por parte de los sirios contra las nuevas estructuras de liderazgo del país tras el derrocamiento del presidente Bashar al-Assad. “Esperamos que se forme un nuevo grupo de resistencia”, dijo Khamenei en una ceremonia religiosa en Teherán. Los jóvenes sirios en particular resistirían a aquellos que habían hecho repetidamente que su país y su futuro fueran inseguros, dijo el clérigo según la agencia de noticias ISNA. La caída del gobernante de larga data de Siria fue un golpe severo para Irán, que ha visto debilitada toda su política en Oriente Medio como resultado. Al-Assad era considerado un aliado estratégicamente importante en el autoproclamado “eje de resistencia” de Irán contra su archienemigo Israel. Siria también sirvió como un corredor para las entregas de armas iraníes a la milicia de Hezbollah en Líbano. El país apoyó generosamente a al-Assad tanto financieramente como militarmente y calificó al grupo Hayat Tahrir al-Sham (HTS) de Siria, que lideró el derrocamiento del régimen, como una organización terrorista.
