Un alto el fuego mediado por Estados Unidos entre Israel y Hizbollah parecía mantenerse el miércoles por la mañana, lo que suscitaba esperanzas de que algunos de los más de 1 millón de civiles libaneses desplazados por el conflicto podrían regresar a sus hogares.
El acuerdo, que entró en vigor a las 4 de la mañana hora local, fue descrito por el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, como “diseñado para ser un cese permanente de las hostilidades”.
Miles de residentes evacuados intentaron regresar a sus hogares en los suburbios del sur de Beirut, devastados por los bombardeos, el miércoles, mientras que el gobierno libanés respaldaba oficialmente el alto el fuego.
“Hoy comenzamos el proceso de reconstrucción de lo que fue destruido”, dijo el primer ministro de Líbano, Najib Mikati. “A pesar del gran dolor y esta gran catástrofe que afligió a la nación… es un nuevo día”.
Pero como señal de la fragilidad del acuerdo, las Fuerzas de Defensa de Israel emitieron un “mensaje urgente” a los residentes del sur del Líbano, advirtiéndoles que no regresen a sus aldeas ni se acerquen a las fuerzas israelíes.
Un funcionario de seguridad israelí dijo que los aviones del país seguían patrullando sobre Líbano y que las tropas terrestres estaban posicionadas tierra adentro y “preparadas para cualquier desarrollo y cualquier violación”.
Agregó que desde la mañana ha habido “varias instancias” en las que “personas sospechosas” se han acercado a las tropas israelíes, que respondieron con fuego de advertencia.
El funcionario dijo que dichos “eventos aislados” podrían repetirse en las próximas horas “hasta que la gente entienda lo que está sucediendo en el terreno”.
El ejército libanés también instó a los civiles a esperar antes de regresar a “territorios ocupados” en el sur del país y a ser cautelosos debido a la munición sin explotar en otras áreas.
Más de 1 millón de personas en Líbano han sido desplazadas por los combates, que se desencadenaron cuando Hizbollah, el grupo militante respaldado por Irán, comenzó a disparar hacia el norte de Israel en los días posteriores al ataque de Hamas el 7 de octubre de 2023 desde Gaza.
Cerca de 60,000 israelíes también han sido evacuados del norte de su país debido a los disparos de cohetes, misiles y drones de Hizbollah.
Durante el conflicto, más de 3,700 libaneses y más de 140 israelíes han muerto.
La ofensiva infligió una serie de golpes devastadores a Hizbollah, matando a su líder de mucho tiempo, Hassan Nasrallah, y dañando grandes cantidades de sus armas e infraestructura, además de destruir amplias extensiones del este y sur del país.
En un mensaje de video pregrabado el martes por la noche, el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, dijo que el objetivo de la guerra había sido devolver a los residentes del norte de Israel a sus hogares. Pero no llegó a pedirles que lo hagan de inmediato.
Alcaldes del norte de Israel y jefes de consejos regionales criticaron a Netanyahu el martes por aceptar el acuerdo con Hizbollah.
© Bilal Hussein/AP
Según los términos del acuerdo, anunciado por Biden y aprobado por el gabinete de Israel, las FDI se retirarán gradualmente de Líbano en un período de 60 días y serán reemplazadas por el ejército libanés.
Se requiere formalmente que el gobierno libanés “impida que Hizbollah y todos los demás grupos armados en el territorio de Líbano lleven a cabo operaciones contra Israel”, mientras que Israel está obligado a “no llevar a cabo ninguna operación militar ofensiva contra objetivos libaneses”.
A Hizbollah se le prohibirá reconstruir su infraestructura en partes del sur de Líbano. Se supone que los combatientes del grupo se desplazarán principalmente al norte del río Litani, que corre hasta 30 km de la frontera entre Israel y Líbano.
El acuerdo se basa en la Resolución 1701 del Consejo de Seguridad de la ONU, que puso fin a la guerra previa entre Israel y Hizbollah en 2006, pero que nunca se implementó correctamente.
Hizbollah ha aceptado el acuerdo de alto el fuego, según personas involucradas en las negociaciones.
Irán también dio la bienvenida al alto el fuego, a pesar de insistir previamente en que Israel tenía que poner fin a su guerra contra Hamas en Gaza antes de que pudieran detenerse las hostilidades.
Hizbollah es la fuerza más poderosa en el “eje de resistencia” liderado por Teherán, un paraguas de grupos militantes que comenzaron a lanzar ataques contra Israel en solidaridad con Hamas.
Hamas emitió una declaración elogiando los “inmensos sacrificios” de Hizbollah y el “papel fundamental” que jugó en las hostilidades del último año, pero no llegó a elogiar el alto el fuego.
Biden dijo que Estados Unidos y Francia trabajarán con Israel y Líbano para que el acuerdo de esta semana se implemente completamente, agregando que no se desplegarán tropas estadounidenses en el sur de Líbano.
Añadió que su administración perseguirá un esfuerzo para reavivar las conversaciones entre Turquía, Egipto, Qatar e Israel sobre un alto el fuego en Gaza.
Mike Waltz, el asesor de seguridad nacional del presidente electo Donald Trump, también ha elogiado lo que él llamó “pasos concretos hacia la desescalada en Oriente Medio”.
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En partes de Dahiyeh, un área de Beirut donde Hizbollah tiene presencia, el tráfico estaba parado, mientras la gente intentaba regresar a sus hogares. Muchos agitaban tanto las banderas de Hizbollah como las de Líbano mientras cantaban y disparaban al aire en celebración.
“Tan pronto como las bombas cesaron esta mañana, vine aquí”, dijo Hajj Amin, un notario de 56 años. “Solo quería ver con mis propios ojos lo que el enemigo había hecho a mi vecindario”.
Nabih Berri, presidente del parlamento libanés, instó a sus compatriotas a “regresar a su tierra, pues será glorificada por su regreso a ella, incluso si viven entre los escombros de casas”.
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Netanyahu dijo que “la duración del alto el fuego depende de lo que suceda en Líbano”.
También insistió en que había alcanzado “pleno entendimiento” con Estados Unidos de que Israel mantendrá “plena libertad militar de acción” en caso de que Hizbollah viole los términos del acuerdo.
“Si Hizbollah viola el acuerdo e intenta armarse, atacaremos”, dijo Netanyahu. “Si intenta reconstruir infraestructura terrorista cerca de la frontera, atacaremos. Si lanza un cohete, si excava un túnel, si trae un camión con misiles, atacaremos”.