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Por Rich McKay
(Reuters) – Dos agentes de policía de Ohio fueron acusados por un gran jurado en la muerte de un hombre negro al que los agentes inmovilizaron con una rodilla cerca de su cuello mientras él gritaba “no puedo respirar”, anunció el fiscal del condado el sábado, en un caso que evocó recuerdos del asesinato de George Floyd en 2020.
El gran jurado acusó a los oficiales Beau Schoenegge, de 24 años, y Camden Burch, de 24 años, del Departamento de Policía de Canton, el viernes por cargos de homicidio imprudente en la muerte de Frank Tyson, de 53 años, quien fue retenido después de ser sospechoso de abandonar la escena de un accidente de un solo vehículo el 18 de abril, dijo Kyle Stone, el fiscal del condado de Stark, Ohio.
“Nadie está por encima de la ley”, dijo Stone en una rueda de prensa. “Y nadie está tan por debajo de la ley que no merezca sus protecciones”.
No estaba claro si alguno de los oficiales estaba representado por un abogado. El Departamento de Policía de Canton no respondió de inmediato a las preguntas de Reuters el sábado.
En las imágenes de la cámara corporal publicadas por la Policía de Canton a principios de este año, se puede ver a los oficiales deteniendo a Tyson, de Canton Township, y reteniéndolo en un bar cercano donde se sospechaba que había huido después de que su auto chocara contra un poste de servicios públicos.
Después de que los oficiales forcejearan con Tyson en el suelo y lo esposaran, se ve en las imágenes a uno de los oficiales colocando una rodilla en la espalda de Tyson cerca de su cuello durante unos 30 segundos.
Se escucha a Tyson diciendo repetidamente: “No puedo respirar. No puedo… Sáquenme la rodilla del cuello”, mientras un oficial grita: “Cálmate” y “Estás bien”, antes de levantarse.
El video luego muestra a Tyson tendido inmóvil boca abajo durante unos 8 minutos antes de que los oficiales revisen su pulso, le quiten las esposas y comiencen con la RCP. Tyson fue declarado muerto en un hospital local.
El incidente recuerda al encuentro mortal de Floyd con la policía de Minneapolis hace cuatro años. Un video de celular del asesinato de Floyd, que se volvió viral, desencadenó una ola de protestas en todo el mundo contra la brutalidad policial y el racismo.
Muestra a un oficial blanco, Derek Chauvin, arrodillándose en el cuello de Floyd durante más de nueve minutos mientras Floyd, que era negro, suplica por su vida, repitiendo “no puedo respirar” antes de quedarse en silencio.
Chauvin y otros tres oficiales fueron condenados por homicidio involuntario y otros delitos.
Durante la rueda de prensa del sábado, el abogado de la familia de Tyson, Bobby DiCello, calificó las acusaciones como un paso hacia la justicia.
“Reconocemos que este es solo un paso para lograr justicia para Frank y su familia en lo que ha sido un camino largo y muy difícil”, dijo DiCello. “Es increíblemente raro lograr un resultado como este”.
Los cargos, un delito de tercer grado, conllevan una sentencia potencial de 36 meses de prisión y una multa de $10,000.
Tanto Schoenegge como Burch fueron colocados en funciones administrativas después del incidente. Permanecían bajo custodia el sábado, y se programó una audiencia de fianza para el lunes por la mañana.
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