Según un informe de Bloomberg que cita a “personas familiarizadas con la investigación”, los reguladores en la UE se están preparando para tomar una decisión que prohíba las reglas de Apple contra el direccionamiento para los servicios de música.
Actualmente, Apple requiere que los servicios de suscripción digital en iPhone o iPad ofrezcan suscripciones solo a través del procesamiento de pagos de Apple, por el cual la empresa se lleva del 15 al 30 por ciento de cada compra. Servicios como Spotify pueden permitirte suscribirte en la web o en otro lugar donde no tengan que pagar una gran parte de la tarifa por compra en aplicaciones a Apple, pero están muy limitados en su capacidad para dirigir a los clientes a hacerlo. Apple prohíbe a empresas como Spotify (y otras) proporcionar enlaces u otros medios directos para que los clientes vayan a otro lugar para pagar.
Spotify ha estado luchando contra esto durante años, argumentando que le da a Apple una ventaja injusta con su propio servicio de Apple Music, y les obliga a subir los precios para compensar el recorte de ingresos de Apple.
El informe afirma que la comisión está “ultimando una decisión que prohibiría la práctica de Apple de bloquear a los servicios de música para alejar a sus usuarios de la App Store hacia opciones alternativas de suscripción”. Se espera que la decisión se tome a principios del año que viene.
No está claro qué exigiría exactamente la decisión a Apple. Con decisiones anteriores, Apple ha sido obligada a cambiar sus políticas (al menos en la UE). Es probable que a la empresa se le dé algún plazo después del cual deberá permitir que los servicios de música competidores ofrezcan opciones de suscripción que no sean el sistema de compra en aplicaciones de Apple. Podría ser más amplio, exigiendo tales concesiones más allá de solo los servicios de música. Incluso podría haber una multa monetaria: la penalización por infringir las normativas antimonopolio de la UE en este asunto puede llegar hasta el 10 por ciento de la facturación global anual de una empresa, lo que en el caso de Apple serían decenas de miles de millones de dólares. Sin embargo, tales multas máximas son raras.